Julión Álvarez se aferra a su carrera y aunque sabe que aún es novel, espera que la gente lo siga apoyando.
El cantante de música regional mexicana reconoce que hay muchas cosas que le han dolido, pero no las recuerda. Dice, también, que es travieso y que le gusta hacer muchas cosas que “ahora llaman bullying”.
Hace unos días, el Presidente Enrique Peña Nieto dijo que el cantante era un ejemplo para la juventud. “Un ejemplo de ‘él es el correcto’, no lo soy. Creo que más bien se refería a que un chiapaneco de un pueblo tan chiquito ha logrado tanto”, explica.
Según Álvarez fue él quien le pidió a Manuel Velasco conocer al presidente. “Durante esta gira he podido conocer a muchos gobernadores, pero nunca había conocido a un presidente, ahora ya tengo mi foto con él”, dice.
En medio de una gira de conciertos, Julión se hace espacio para hablar de él y entre sus tiempos libres pide café, camina y se acomoda el sombrero, antes de decir “el que sigue”.
Refiere que luego de ser coach en el reality musical La Voz… México los compromisos crecieron y ahora la música de banda encuentra más lugares donde puede ser escuchada.
“Hemos ganado más terreno y le hemos dado la oportunidad a otros géneros. De pronto hago un bloque donde meto esas fusiones y me dicen: ‘Julión eso qué’, o de repente voy a mi pueblo y amigos que son rancheros me dicen: ‘déjate de mam…’ y yo les digo que ‘tengo que buscarle un poquito de todo, denme chancita, me estoy calando’”, explica el intérprete.
A pocos días de cumplir 32 años, el chiapaneco reconoce que sólo espera tener tiempo para poder hacer una fiesta con sus amigos y confiesa que en realidad no tiene un deseo especial para la fecha.
Álvarez consiguió tener un sold out con la primera fecha que abrió en el Auditorio Nacional y a raíz de eso decidió abrir dos fechas más.
El Universal