El trastorno bipolar es una afección en la que una persona tiene períodos de depresión y episodios de manía, que son en los que se está extremadamente feliz, triste o irritable, más allá de lo normal; además de experimentar cambios extremos en la actividad, la cual puede disminuir o aumentar drásticamente, en conjunto con los niveles de energía, informó Alberto Ladrón de Guevara, médico especialista en psiquiatría, adscrito al Hospital General Regional (HGR) Nº 1 del IMSS, Morelos.
Lo anterior, fue en el marco del Día Mundial Bipolar, que se conmemora este 30 de marzo, con el fin de difundir las acciones de prevención y tratamiento de este padecimiento.
El especialista del Seguro Social en Chihuahua dio a conocer que actualmente el trastorno bipolar es considerado como un grave problema de salud y representa un alto riesgo de mortalidad cuando éste se agrava.
En ese sentido destacó que a la fecha, representa la sexta causa de discapacidad en el mundo, toda vez que alrededor del uno por ciento de la población puede presentar esta patología.
Por lo tanto, Ladrón de Guevara externó la importancia de que la población preste atención en la salud mental, acudiendo periódicamente con su médico familiar cuando se detecten síntomas, conductas y emociones fuera de lo normal.
Refirió además que el trastorno bipolar afecta por igual a hombres y mujeres; generalmente comienza entre los 15 y 25 años, e incluso puede presentarse hasta los 50 años de edad; resaltó que en la mayoría de los casos, no hay una causa clara para la presencia de este trastorno.
No obstante, manifestó que existen factores que pueden desencadenar un episodio maníaco, entre los que destacan el parto, el consumo de antidepresivos, esteroides o drogas psicoactivas, así como periodos prolongados de insomnio.
Indicó además que este trastorno puede manifestarse en periodos mixtos de manías y de depresión. Señaló que la depresión, es más frecuente que los episodios de manía; sin embargo advirtió que el patrón no es el mismo en todas las personas con trastorno bipolar.
Detalló que la fase maníaca, puede durar de días a meses y puede abarcar los siguientes síntomas: euforia, autoestima elevada (sentirse grandioso), irritabilidad, distraerse fácilmente, poca necesidad de sueño, deficiente capacidad de discernimiento, control deficiente del temperamento, comportamientos imprudentes y falta de autocontrol, abuso de alcohol; tener múltiples parejas sexuales, hacer gastos exagerados o sin sentido; ánimo muy irritado como pensamientos apresurados, hablar mucho, entre otros.
Añadió que los episodios depresivos puede incluir: tristeza, dificultad para concentrarse, recordar o tomar decisiones; llanto fácil, presentar problemas en la alimentación como inapetencia y pérdida de peso o consumo exagerado de alimentos y aumento de peso; fatiga o desgano; sentimiento de minusvalía, desesperanza o culpa; pérdida de placer en actividades que anteriormente disfrutaba; pérdida de la autoestima, e incluso pensamientos suicidas; dificultad para conciliar el sueño o dormir demasiado, por mencionar algunos.
Finalmente, comentó que en caso de presentar cualquier de los síntomas anteriormente mencionados, se debe de buscar asistencia psiquiátrica y nunca automedicarse.