El director de la Comisión Estatal de Suelo, Vivienda e Infraestructura (Coesvi), Raúl Javalera Leal, señaló que hace 10 días se entregaron cinco viviendas a familias originarias de la zona serrana, las cuales se vieron obligadas a dejar sus lugares de origen a causa de la violencia y del crimen organizado.
Javalera Leal explicó que, por instrucción de la Secretaría General de Gobierno, la Coesvi cedió en comodato cinco viviendas para un igual número de familias provenientes de una comunidad de Guadalupe y Calvo, quienes podrán residir en dichos espacios por un periodo de entre uno a tres años de manera gratuita.
Estas familias que llegaron canalizadas por el Fideicomiso de Atención a Niños Víctimas de la Violencia (Fanvi), podrían buscar esquemas adecuados para quedarse con las viviendas en caso de que decidan asentarse de manera permanente y así garantizarles un patrimonio.
“Las personas desplazadas por la violencia tienen un trato especial, se han estado atendiendo, tenemos el caso de cinco personas de una comunidad allá por Guadalupe y Calvo que se están atendiendo, ya se les otorgó la vivienda… El gobernador nos dió la instrucción que todas esas personas desplazadas se atiendan”.
El funcionario explicó que ésta es la primera vez que la Coesvi atiende el tema de desplazados, sin embargo ya ha trabajado con el Fanvi en diversas ocasiones para impulsar el mejoramiento de vivienda en comunidades indígenas.
Finalmente aseveró que la dependencia cuenta con 200 casas listas para atender la demanda de los desplazados por la inseguridad, toda vez que el Instituto Chihuahuense de la Mujer (Ichmujer) tiene en resguardo a 26 familias más y espera la llegada de otras personas procedentes de la Sierra Tarahumara.