Las supervisiones realizadas por la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) a los diversos centros penitenciarios de la entidad chihuahuense, dejó como resultado conocer las bajas calificaciones en las que se mantienen los centros de reinserción para jóvenes.
Se indica que estos lugares no han sido objeto de inversión pública, presentando deficiencias en construcción, remodelación o mantenimiento, pero además de la infraestructura se cuenta con otras deficiencias en el tema de derechos humanos de los aproximadamente 500 menores infractores internos en el estado.
El CERSAI en Chihuahua mantuvo una calificación de 6.2, donde los derechos humanos que garantizan el desarrollo de actividades productivas y educativas mantuvieron un 4.4, seguido de la situación jurídica de los internos con 5.6, según el informe de la CEDH.
En cuanto al CERSAI de Cuauhtémoc -donde se trasladaron a 270 infractores-, mantuvo una calificación más alta de 6.5, donde en la situación jurídica de los internos se encontraron más problemas, otorgándoles una calificación de 5.0.
A pesar de que el CERSAI de Cuauhtémoc obtuvo mejores calificaciones en este tema, los menores infractores fueron trasladados al de Ciudad Juárez, donde las calificaciones van de 4.4 en el desarrollo de actividades productivas y educativas, así como un cuatro en no tener grupos especiales dentro de instituciones penitenciarias.