Cinco jugadoras de la selección estadounidense de futbol que ganó la última Copa del Mundo acusaron a la Federación Nacional de discriminación salarial en una querella radicada ante una comisión gubernamental.
Alex Morgan, Carli Lloyd, Megan Rapinoe, Becky Sauerbrunn y Hope Solo argumentan en su documento ante la comisión para la igualdad de empleo que les pagan casi cuatro veces menos que sus homólogos de la selección estadounidense de hombres. La denuncia fue anunciada el jueves en un comunicado del bufete de abogado que representa a las futbolistas.
“Las cifras hablan por sí mismas”, dijo Solo en un comunicado. “Somos las mejores del mundo, hemos ganado tres mundiales, cuatro campeonatos olímpicos, y a la selección de hombres le pagan más sólo por participar que a nosotras por ganar campeonatos”.
El abogado Jeffrey Kessler, uno de los representantes de las jugadoras, dijo que la situación de la negociación del convenio laboral generó la necesidad de que las futbolistas actúen para frenar lo que consideran “el trato injusto y discriminatorio” que han experimentado durante años.
“La realidad es que este equipo es más valioso para la Federación Estadounidense de Futbol que la selección de hombres. Eso lo demuestran los hechos”, dijo Kessler en una conferencia telefónica. “Y sería justificado si piden ganar más que los hombres. Pero el primer paso es pedir trato igual. Ese debería ser un paso fácil para la Federación”.