Desde el inicio de la reforma energética, los datos del Instituto Nacional Estadística y Geografía (Inegi) arrojan que el precio de la luz ha subido un 19 por ciento a nivel nacional, el gas ha aumentado un 7 por ciento y la gasolina un tres por ciento, rompiendo de momento con el discurso presidencial sobre los beneficios de dicha reforma estructural.
El analista de Forbes, Sergio Saldaña Zorilla, manifestó que entre julio del 2014 –un mes previo a la aprobación final de la reforma energética- y febrero del 2016, el precio de la luz incrementó en promedio un 19 por ciento, si se toman en cuenta las 46 ciudades utilizadas como muestra por el Inegi para le medición de precios en el país.
La atención se centra en 14 estados, incluyendo a Chihuahua, por los incrementos mayores en esta materia. El analista señala que en Chihuahua ha aumentado un 22 por ciento el precio de la luz, empatándose con Colima y siendo superado por Ciudad Acuña con un aumento del 63 por ciento; Culiacán, Hermosillo y Mexicali con 55%; Monterrey, Veracruz, Iguala y Mérida con un 47%; Villa Hermosa, Matamoros y Monclova con un 43 por ciento.
El analista destaca además el aumento del siete por ciento en el gas, detallando que en julio del 2014 el precio promedio del gas LP en el país era de 7.5 pesos por litro y en febrero del 2016 este reportaba un precio de 8.1 pesos por litro.
Además refiere la caída del 70 por ciento del precio internacional del petróleo, lo que ha generado que el precio promedio de las gasolinas Magna y Premium haya aumentado en un tres por ciento desde el inicio de la reforma energética.
“Esta reforma energética está hundiendo más al país. Si el gobierno mexicano realmente hubiera querido mejorar la calidad de vida de los mexicanos, esta reforma energética nuca hubiera tenido lugar. Todos estos incrementos de precios combinados están causando un daño irreparable al bienestar de las mayorías de este país”, puntualiza el analista.