Tuvo que pasar año y medio en la banca del Málaga para que le llegara su oportunidad bajo los tres postes, pero Guillermo Ochoa muestra ningún arrepentimiento de la decisión tomada; al contrario, asegura que la paciencia y constancia siempre rinden frutos.
“Siempre he dicho que no me arrepiento de haber venido al Málaga. La decisión que tomé de venir fue bien pensada y bien ejecutada, tardó en llegar la opción para jugar, pero lo importante fue la paciencia y la constancia (…) Nunca dudé de mí, porque en estos periodos lo peor que puede hacer un jugador es dudar de sí mismo”, expresó el mexicano en entrevista con el diario La Opinión de Málaga.
Con la titularidad desde hace poco más de un mes por la lesión de Carlos Kameni, el surgido de las Águilas del América se ha ganado el cariño de la afición malagueña, misma que en una encuesta reciente tuvo una abrumadora respuesta positiva para que siga siendo el portero titular.
“Se agradece que la gente opine de esta manera porque eso significa que estoy haciendo bien mi trabajo y es la línea que debo seguir. La gente siempre me ha mostrado mucho cariño, por supuesto que ahora mucho más”, expresó.
‘VOLVÍ A SENTIRME FUTBOLISTA’
Guillermo Ochoa recordó, en la misma entrevista, el momento de su debut en Liga el pasado 5 de marzo en casa del Deportivo La Coruña, compromiso en el que recibió tres goles.
“El primer partido con el Dépor no me dio ni tiempo a pensarlo porque se produjo el debut durante el partido, llegó la lesión (de Kameni) y rápidamente tuve que entrar. Después de estar tanto tiempo sin jugar es difícil los recorridos, la línea, la distancia, volver al ritmo de juego, la concentración, la tensión.
“La siguiente semana la afronté como las demás, preparando y entrenando para jugar, pero ya sabía que en ese momento los ojos iban a estar puestos en mí. Aquí querían verme jugar, en mi país estaban esperando que jugara, vino la prensa… Había mucha tensión y presión alrededor de mí, pero disfruté volver a sentirme futbolista”, acerca del partido en que vencieron 1-0 al Sporting el 11 de marzo.
Finalmente, Paco Memo negó haberle pedido explicaciones a su entrenador por todo el tiempo en que no fue considerado y dijo que con Kameni lleva una “relación de trabajo, de respeto, de estar bien con el grupo. Jamás existieron malas palabras o indisciplina de mi parte”.
[MEDIOTIEMPO]