Xiong Xuan, un adolescente chino de 18 años empleado de una fábrica, murió tras desconectar el cable con el que había conectado su teléfono móvil a su ordenador en un cibercafé en la ciudad de Wuhan.
El incidente tuvo lugar el pasado 15 de abril, informan los medios locales. El hermano del fallecido, que estaba presente en el lugar del deceso, afirmó que Xiong gritó antes de que su pie rozara las patas metálicas de la mesa. Murió en el acto.
Sin embargo, ninguno de los empleados del establecimiento ofreció ayuda. El tío del joven, que también trabajaba en la misma fábrica que su sobrino, llegó al lugar de los hechos tan pronto como pudo y lo llevó a un hospital. Sin embargo, los médicos solo constataron su muerte a causa de la descarga eléctrica.
RT Noticias