A poco más de 100 días del inicio de su administración, el alcalde panista de Santa Ana Jilotzingo, Juan Antonio Mayén Saucedo, fue asesinado junto con el subdirector de Seguridad Pública local, Omar Calzada, y otro hombre más, cuando circulaban a bordo de dos vehículos sobre la carretera Naucalpan-Ixtlahuaca, mientras otros dos acompañantes resultaron lesionados.
La Procuraduría General de Justicia del Estado de México (PGJEM) indaga, entre otras líneas, la probable vinculación del alcalde con un grupo delictivo que opera en la zona.
Cerca de las 9:40 de la mañana de ayer, varios sujetos a bordo de una camioneta interceptaron la unidad en la que se desplazaba el presidente municipal y una patrulla que lo acompañaba, y dispararon en repetidas ocasiones. En el lugar murieron tres personas, incluido el edil, y dos más resultaron lesionados, quienes fueron trasladados a un hospitales cercano.
El fiscal de Asuntos Especiales de la Procuraduría General de Justicia del Estado de México (PGJEM), Martín Marín Colín, aseveró que aunque no se pueden descartar líneas de investigación, por las características en las que ocurrió el hecho y por antecedentes en carpetas de investigación, se deja ver una posible relación del alcalde asesinado con un grupo delictivo.
Señaló que en la escena del crimen los peritos contabilizaron más de 100 cartuchos percutidos de armas de grueso calibre.
El gobierno mexiquense lamentó los hechos y envió sus condolencias a las familias de los fallecidos.
Cabe señalar que el secretario de general de Gobierno del Estado de México, José Manzur Quiroga, negó hace 20 días que alguno de los 125 presidentes municipales de la entidad estuviera relacionado o bajo investigación de las autoridades, por su relación con grupos de la delincuencia organizada.
En tanto, los partidos Acción Nacional y de la Revolución Democrática exigieron se esclarezcan los hechos donde perdió la vida el alcalde de Jilotzingo y se refuerce la seguridad en la entidad.
Información de Excélsior