Lugares ‘malditos’ en México

Las historias de terror abundan en cualquier lugar y nuestro país no está exento de ello. Seguramente has esuchado leyendas de sitios ‘embrujados’ o donde supuestamente aparecen fantasmas y se manifiestan espíritus con pesadas energías.

Pero no sólo es el mito el que circula en el popular de la gente, sino las presuntas vivencias que son contadas de generación en generación, sucedidas a personas comunes.

Si te gustan las emociones terroríficas, prepárate, porque este jueves te traemos un recuento de los lugares más tenebrosos y tétricos de México.

Aquellos que también son llamados ‘lugares malditos’; debido a que han permanecido por muchas generaciones, las versiones que circulan no son cien por ciento confiables.

La Isla de las Muñecas

Con el objetivo de protegerse de una sirena que se lamentaba y que quería llevarlo a la muerte, un hombre llamado Julián Santa Ana decidió recoger y colgar alrededor de su chinampa, ubicada en la delegación Xochimilco, decenas de muñecas.

Hoy pueden ser visitadas en un trayecto que recorren las trajineras salientes del embarcadero Fernando Celada; de acuerdo con versiones, en el lugar permanece el espíritu de dicho trabajador.

La casa de Cañitas

Carlos Trejo causó gran conmoción cuando dio a conocer su libro ‘Cañitas’, en el que relataba la muerte de varias personas cercanas a él tras haber jugado con una ouija.

Dichas tragedias tuvieron como centro una casa en la Ciudad de México que se volvió famosa por lo mismo; los sucesos paranormales allí sucedidos habrían de perdurar en el gusto popular.

Para llegar a ella se debe tomar la Calzada México Tacuba en dirección a Insurgentes (saliendo desde Mariano Escobedo).

En la calle de Instituto de Higiene, una antes del Árbol de la Noche Triste (Parroquia de Nuestra Señora del Pronto Socorro) se debe dar vuelta a la derecha y continuar hasta Felipe Carrillo Puerto, donde se da vuelta a la izquierda.

En Cerrada de Kara se da vuelta a la izquierda y la primera calle a la derecha es Cerrada Cañitas, esa calle conduce directamente a Cañitas.

La Moira

Se trata de una casa también pero ubicada en San Miguel Chapultepec, sobre José Vasconcelos con el número 125, en la capital mexicana.

Según cuenta la historia, un niño vio a otro menor ahorcado en la casa; por el miedo huyó pero después regresó, pero tiempo después ese mismo niño apareció colgado.

Según anota De10, en el lugar se llevan a cabo sesiones espiritistas para contactarlos.

Callejón del Aguacate

Esta leyenda se desarrolla en Coyoacán, también en la Ciudad de México, y relata la historia de una familia que al jugar con la ouija hizo un pacto con Satán.

Sucedido en la calle detrás del centro Jesús Reyes Heroles, un día el padre mató a sus familiares, pero él también apareció decapitado.

La misma fuente anotó a que quien entre ahí, por la energía que se percibe, pacte con la maldad.

El Hospital Juárez

En este nosocomio nació ‘La Planchada’, supuesta enfermera muerta que se aparece a los enfermos para ayudarlos en lo que se necesite.

Según la historia, en los últimos años de su vida se dedicó a hacer el mal a los pacientes, por lo que en su muerte, arrepentida, se refugió en la solidaridad.

El espinazo del Diablo

Ubicado en Durango, es más un espectáculo de aproximadamente 10 kilómetros, ofrecido cuando se transita por la Sierra Madre Occidental.

Según se cuenta, recibió su nombre porque en sus inmensas barrancas que se despliegan a ambos lados puede verse al diablo, aquella entidad suprasensible que representa la encarnación suprema del mal.

Gracias a la luz del sol y las sombras que se forman, también es probable que se distingan otras figuras, ya dependiendo de la imaginación personal.

Está localizado a la altura del kilómetro 168 de la carretera 40, misma que une a la ciudad de Durango con el puerto de Mazatlán.

Museo de las Momias

Está en Guanajuato y en su interior aguarda cuerpos momificados de personas que alguna vez existieron, lo que ha alimentado la teoría de que una energía del más allá está presente en el lugar.

Dichas momias fueron extraídas de cementerios que exhumaron los cuerpos luego de que se dejara de pagar la renta del espacio en el mismo.

Estas conservas están completamente integradas a la cultura de dicho estado, pues son consideradas Patrimonio de Guanajuato, el cual se distingue también por su arquitectura barroca.

Información de El Gráfico