Una de cada cinco víctimas de conflictos armados en el mundo pereció en México y en Centroamérica en 2015, según el Informe sobre Conflictos Armados que publicó hoy el Instituto Internacional de Estudios Estratégicos (IISS, por sus siglas en inglés), basado en Londres.
El reporte asegura que en esta región murieron 34 mil de los 167 mil fallecidos en situación de conflicto en el planeta.
Con ello, el IISS asume que la llamada “guerra contra el narcotráfico” coloca a México y las naciones del Triángulo Norte de Centroamérica –Honduras, Guatemala y El Salvador– dentro de la lista de países en situación de conflicto armado.
Y el número de muertos en la región se incrementó, al pasar de 30 mil en 2014 a 34 mil en 2015, plantea el estudio.
De acuerdo con IISS, México y los países del Triángulo Norte de Centroamérica sumaron 99% de las víctimas de conflicto armado en el subcontinente, ya que las negociaciones de paz entre las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y el gobierno disminuyeron el número de muertos de 500 a 350 entre 2014 y 2015.
Fundada en 1958, la institución resultó pesimista en cuanto a los conflictos en México y Centroamérica. “Las víctimas de estos conflictos están a la par de Irak y Nigeria, aunque la mayoría de los enfrentamientos se lleven a cabo con armas ligeras”, subraya el documento.
Luego, añade que “ninguno de estos conflictos se acerca a una resolución o un decrecimiento”.
Según los expertos, la región latinoamericana resultó la segunda más letal del mundo en materia de muertes por conflictos armados, detrás de Medio Oriente y África del Norte, donde los conflictos entre fuerzas gubernamentales y grupos insurgentes y yihadistas como el Estado Islámicomataron a 83 mil personas.
El informe subraya que los conflictos que sacudieron Siria, Irak, Centroamérica, México, Afganistán y Nigeria en 2015 causaron 80% de las víctimas a nivel global.
“Desde 2008 hubo un descenso en el número de conflictos activos, pero un incremento importante en los muertos que han generado”, alerta el IISS. Agrega que el número de refugiados se disparó en los últimos tres años, al pasar de 33 millones en 2013 a 46 millones a mitades de 2015.
Proceso