La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) dio a conocer este día que a partir del momento que reciba el expediente de extradición de Joaquín “El Chapo” Guzmán dispondrá de 20 días para analizar si se cumplen o no los requisitos para enviar al capo a Estados Unidos.
“Una vez que sea remitido el expediente de extradición a esta Secretaría de Estado, se estará en posibilidad de analizar la solicitud formulada en el término de 20 días hábiles que establece la Ley de Extradición Internacional”, informó la SRE este lunes en un comunicado.
La Cancillería recordó que este día el Juez Tercero de Distrito de Procesos Penales Federales en la Ciudad de México le notificó que es procedente al proceso de extradición en contra del capo sinaloense “por el cargo de asociación por importar y poseer con la intención de distribuir cocaína”.
La dependencia a cargo de Claudia Ruíz Massieu dijo que “el Gobierno de México no analizará la culpabilidad o inocencia del reclamado en los delitos que le son imputados en otro país, sino que únicamente se verificará que se cumplan los requisitos del Tratado Bilateral aplicable para la procedencia o no de la petición” conforme al marco jurídico constitucional mexicano, “con respeto a los derechos humanos y en seguimiento a los principios de política exterior”.
Guzmán Loera fue traslado el fin de semana el Centro Federal de Readaptación Social (Cefereso) del Altiplano, en el Estado de México, al Cefereso de Ciudad Juárez, Chihuaha, lo que desató distintas versiones sobre su posible extradición.
La opinión del Juez, emitida la semana pasada y publicada hoy, aproxima a Guzmán a la extradición, aunque este es un proceso complejo que podría no resolverse hasta dentro de “año, año y medio”, dijo a Efe el abogado Samuel González, experto en procedimientos trasnacionales.
El presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, anunció en enero pasado que se trabajaba para agilizar el proceso de extradición del capo.
Una vez que la Cancillería avale la extradición, la defensa tendrá un plazo de 30 días para interponer un amparo.
Este recurso puede ser contra la fundamentación y motivación de la decisión judicial o contra la inconstitucionalidad de la ley o el tratado de extradición.
“Ese proceso es bastante complejo, puede llevar unos 3 o 4 meses” desde que se interpone el amparo, explicó González.
Una vez resuelto el amparo, Guzmán tiene derecho a una revisión de éste, la cual podría llevar el asunto hasta la Suprema Corte de Justicia de la Nación si se encuentran puntos de constitucionalidad.
En suma, se está ante un escenario de “un año, año y medio”, acotó el letrado, remarcando que “no hay ningún atajo” para que pudiera producirse una “extradición express”, una figura que en México no es posible.
El único camino posible para que fuera trasladado a Estados Unidos en un menor plazo de tiempo sería que “el Chapo” acepte la extradición, tras llegar a un acuerdo, o no, con el país vecino.
El sinaloense, que siempre se mostró reticente ante una posible extradición, ahora está “abierto” a la posibilidad de que esta suceda, afirmaron a Efe dos de los abogados del narcotraficante el pasado sábado.
“Su deseo es permanecer en México, ser juzgado por leyes y jueces mexicanos”, pero “no descarta una posibilidad de hacer una negociación ante el Gobierno” estadounidense, precisó el letrado Juan Pablo Badillo.
EU NO SE PRONUNCIA
La Fiscal General estadounidense, Loretta Lynch, rechazó hoy fijar una fecha para la extradición del narcotraficante mexicano a su país, donde varios tribunales federales lo reclaman por decenas de delitos de tráfico de drogas y lavado de dinero.
“No puedo darles una fecha o una predicción sobre cuándo se producirá”, dijo hoy Lynch en una conferencia en el Departamento de Justicia de Estados Unidos, en respuesta a las preguntas de la prensa.
En su rueda de prensa, Lynch rehusó comentar sobre el sorpresivo traslado el sábado de “El Chapo” a una prisión de alta seguridad en la fontera con Estados Unidos, desde la cárcel del Altiplano, de donde se fugó en julio del año pasado a través de un túnel y a donde volvió preso en enero tras su recaptura.
“Sus condiciones de reclusión están bajo el control (de las autoridades mexicanas), así que no puedo hacerles un comentario sobre eso”, respondió la Procuradora a la prensa
Sin Embargo