En 2015 en México se registraron 30 mil 97 actos de corrupción por cada 100 mil habitantes, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Calidad de Impacto Gubernamental del Inegi publicada este miércoles, informaron El Financiero y Sin Embargo.
El Estado de México fue la entidad con una mayor incidencia, con 62 mil 160 actos de corrupción por cada 100 mil habitantes, mientras que Chihuahua se sitúo en el tercer lugar con más de 36 mil acciones de este tipo.
El estado gobernado por el priista Eruviel Ávila fue seguido de Sinaloa, con 58 mil 232 actos corruptos, y de Chihuahua, con 36 mil 472 casos.
La encuesta ofrece información referente a “las experiencias en la realización de trámites, pagos y solicitudes de servicios públicos, además de otros contactos con autoridades que durante 2015 tuvo la población de 18 años y más, que reside en ciudades de 100,000 habitantes y más”, explicó el Inegi.
Diversos informes presentados en días recientes han señalado que la corrupción representa uno de los principales problemas en México. Esta práctica equivale al 9 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) del país y se consume 347 mil millones de pesos cada año. Además es la culpable de haber permitido a las organizaciones criminales desarrollar y establecer verdaderas estructuras de poder paralelas en el país.
Se trata de un fenómeno endémico que en combinación con una fuerza de policía mal pagada han contribuido a una impunidad casi total en los criminales.
Los mismos informes revelan cómo la corrupción obstruye el desarrollo político y económico al poner en peligro la legitimidad de las instituciones políticas y las industrias.
Apenas el pasado lunes, un análisis del Centro de Estudios Espinosa Yglesias (CEEY), destacó que un factor que ha mermado la confianza de los consumidores es la percepción sobre la corrupción en las esferas gubernamentales.
Marcelo Delajara, director del Programa de Crecimiento Económico y Mercado Laboral del CEEY, dijo a SinEmbargo en una entrevista que las personas perciben que las autoridades no están trabajando para el beneficio del país, sino para enriquecerse ellos mismos.
“La corrupción mina el esfuerzo del ciudadano porque los que se llevan los mejores resultados no son los que se merecen. Hay otro efecto más directo que tiene que ver con las autoridades, la percepción es que ellas ni están trabajando para el pueblo ni para el futuro del país, están trabajando para ellos”, indicó Marcelo Delajara.
Respecto a los servicios públicos básicos los resultados de la encuesta arrojan un descontento de los mexicanos, sólo el 20.7 por ciento de la población se mostró satisfecha con las calles y avenidas que hay en el país, el 25.3 por ciento con la policía y el 33 por ciento con el alumbrado público.
En cuanto a los servicios públicos bajo demanda, el 61 por ciento de la población manifestó estar satisfecha con el servicio de educación pública obligatoria durante 2015, mientras que para el servicio de salud en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) la satisfacción fue de 38.8 por ciento, una disminución de 13.9 por ciento en comparación con la encuesta anterior de 2013.
La atención inmediata (43.3%), la disposición de medicamentos (48.6%) y médicos suficientes (56.3%), fueron las características del servicio de salud del IMSS que presentaron los resultados más bajos.
En el tema del transporte público masivo automotor, el cual se midió por primera vez en la ENCIG 2015, la satisfacción fue sólo del 28.9 por ciento. Se estima que el 69 por ciento de la población mexicana utiliza el servicio de transporte público en autobús urbano, van, combi o microbús.
De esta manera, los resultados arrojaron que sólo el 26.2 por ciento de la población considera que los operadores son respetuosos de los señalamientos viales; el 30.8 por ciento que las unidades están en buen estado; el 59.1 por ciento considera que el tiempo de espera para abordar una unidad es breve y el 69.0 por ciento que las rutas son suficientes.
A partir de la ENCIG se estima que a nivel nacional, del total de trámites, pagos y solicitudes de servicios públicos realizados por los usuarios, en 52.5 por ciento de ellos se presentó algún tipo de problema para realizarlo. De estos problemas, el más frecuente fue el de barreras al trámite con 87.6 por ciento.
La Encuesta Nacional de Calidad e Impacto Gubernamental (ENCIG) 2015 ofrece información referente a la satisfacción con servicios públicos básicos y servicios públicos bajo demanda, así como las experiencias en la realización de trámites, pagos y solicitudes de servicios públicos, además de otros contactos con autoridades que durante 2015 tuvo la población de 18 años y más, que reside en ciudades de 100 mil habitantes y más.
La ENCIG 2015 también proporciona información sobre la percepción de la población acerca del fenómeno de corrupción y las experiencias de corrupción que sufrió la población al realizar trámites, pagos y solicitudes de servicios públicos, además del contacto con autoridades y servidores públicos durante 2015.