El martes pasado un hombre brasileño compartió una fotografía del metro de Río de Janeiro por la cual ha recibido tanto elogios como insultos e improperios a nivel internacional.
En la imagen aparecen varias personas, entre ellas una pareja de mujeres abrazándose cariñosamente, un par de jóvenes esperando el tren y varios más caminando; en la descripción el brasileño Nelson Felippe escribe: “No tengo prejuicios, creo que cada uno hace lo que quiere de su vida. Pero me parece absurdo que yo sea obligado a presenciar una escena como esta”. Y hay mas comentarios como los siguientes:
“Lo que cada uno haga en particular es su problema, pero lo que se hace en público me concierne, merezco respeto”. “Yo me niego a ver una escena como esta y considerarla algo normal”.
“No deseo el mal a nadie, pero las personas deberían procurarse. Están desafiando las convenciones sociales, y eso puede ser peligroso. Si después sucede una tragedia, o peor, si alguien muere, ¿de quién va a ser la culpa? ¿Mía?”.
“¿Cómo va a quedar la mente de un niño que ve esta escena todo día? Los niños van a pensar que es normal esperar el metro sobre la franja amarilla. Siga el ejemplo de las mujeres. Espere el metro antes de la línea y sólo crúcela después de que el metro esté parado y con las puertas abiertas”.
La mayoría de las personas que criticaron tanto la fotografía como la descripción no se dieron el tiempo de leerla completa, pues la crítica, al final, resultó ir dirigida no a la pareja de mujeres sino al joven en el fondo que está parado sobre la línea amarilla.
La imagen ha sido compartida desde entonces en más de 3 mil ocasiones, acumula más de 10 mil ‘likes’ y ha sido retomada por medios de comunicación tanto locales como internacionales.
Información de Agencias