El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, cree que los planes para derrocar su Gobierno siguen en marcha y no descarta la posibilidad de otra rebelión militar.
En sus declaraciones del sábado, el mandatario dijo que todavía no considera neutralizada la sublevación militar del pasado 15 de julio que atentó, según sus propias palabras, no solo contra el Gobierno sino también contra la unidad del país.
De igual manera, volvió a acusar al líder opositor Fethulá Gülen, autoexiliado en EE.UU., de ser el instigador de la tentativa golpista y se comprometió a tomar más medidas contra la “organización terroristas fetulista” y sus partidarios.
“La mente superior todavía está actuando contra nosotros sin compasión. No creo que este (fallido golpe de Estado) haya llegado a su fin. Pero lo que pasa es que nosotros no vamos a dejar de contrarrestarlo”, declaró Erdogan.
Desde el intento de golpe de Estado han surgido especulaciones sobre la autoría e incluso un periódico afín a Erdogan ha señalado que el golpe fue financiado por la Agencia Central de Inteligencia de EE.UU. (CIA, en inglés) y dirigido por un general norteamericano retirado.
HispanTV