Con espiga de honor conformada por trece mandos, la Dirección General de Tránsito acompañó en su traslado a la ciudad de México al Divo de Juárez.
Con un fuerte operativo de seguridad compuesto por 13 motocicletas y seis unidades, se hizo acompañar la carrosa fúnebre durante el recorrido que realizó en por diferentes puntos de la ciudad a partir desde la casa del cantautor, ubicada en 16 de Septiembre y Perú.
El trayecto continúo por la calle 16 de septiembre hacia el poniente para incorporarse a la avenida Juárez, en la que se aminoró la marcha para recorrer la calle donde inicio su carrera artística, con una breve parada en el lugar donde funcionó antaño el Noa Noa, lugar en el que se congregaron cientos de admiradores para darle el último adiós al hijo predilecto de Ciudad Juárez.
Posteriormente se tomó por la calle Gardenias hacia el poniente para luego dirigirse a la Norzagaray para continuar por el puente de la prolongación Juan Pablo II, la Rafael Pérez Serna y la Tecnológico donde centenares de juarenses estacionaron sus vehículos y descendieron de ellos para capturar la última imagen de su ídolo y con pañuelos blancos despedirlo entre gritos y aplausos.
El contingente finalizó en el aeropuerto privado Benito Juárez en donde el personal operativo de Tránsito realizó una formación de honor encabezada por el Presidente Municipal, Javier González Mocken; el secretario de Seguridad Pública, Cesar Omar Muñoz y el Director de Tránsito, Oscar Luis Acosta García, hasta el momento en que partieron las cenizas de Juan Gabriel hacia la ciudad de México, donde se le realizará un homenaje póstumo en el Palacio de Bellas Artes.
El titular de la DGTM mencionó que estarán a la espera de recibir instrucciones para el recibimiento de regreso de los restos del compositor para escoltarlos hasta lo que será su última morada, en su casa de la 16 de Septiembre y Perú, donde serán colocadas encima de la chimenea en la que también se ubica una fotografía suya.