Para 2017 se prevé una drástica disminución en los proyectos de inversión de la Secretaría de Gobernación (SG) y, paralelamente, hay incertidumbre en cuanto a los recursos destinados para la prevención del delito y el principal programa sexenal en este rubro.
Para este año fueron autorizados 517.2 millones de pesos en programas y proyectos de inversión, básicamente para construir y operar centros regionales para la investigación en seguridad nacional, así como ampliaciones en otros inmuebles. Para 2017 sólo habría 72.5 millones en ese concepto, destinados al mantenimiento y conservación de las estaciones migratorias en una decena de entidades (Baja California, Chiapas, Michoacán, Nayarit, Oaxaca, Sinaloa, Sonora, Tabasco, Tamaulipas y Veracruz), acorde con el proyecto elaborado por la Secretaría de Hacienda.
Mientras tanto, en los gastos ordinarios (análisis funcional programático) no aparece el principal programa federal para la prevención social de la violencia y la delincuencia (Pronapred), el cual tiene actualmente un presupuesto cercano a 2 mil millones de pesos.
Al momento se desconoce la causa de esta situación. Por un lado, el Pronapred, creado al inicio del sexenio en curso y difundido como base de la estrategia para atender las zonas más violentas del país, seguiría vigente, puesto que no es mencionado en las bajas.
La única eliminación es lo relativo a la implementación de la reforma al sistema de justicia penal y el otorgamiento de los subsidios correspondientes.
Si bien se menciona al plan antidelito en las bases programáticas 2017, con la clave U006 Programa Nacional de Prevención del Delito, como parte de los asuntos de orden público y seguridad interior, en el documento entregado la semana a los diputados el rubro es citado sólo como fomento de la cultura de la participación ciudadana en la prevención del delito (P023), con un presupuesto de 213.9 millones de pesos, mientras en el gran apartado de prevención del delito con perspectiva nacional hay 25 mil 260 millones de pesos, pero estos recursos serían para los operativos de la Policía Federal.
En medio de un recorte general para Gobernación de 14 por ciento para el siguiente año, la Subsecretaría de Prevención y Participación Ciudadana, creada este sexenio, tendría un presupuesto de 48 millones de pesos.
En resumen, no aparece el Pronapred, el cual inició su operación en 2013 con un presupuesto cercano a 3 mil millones de pesos y paulatinamente ha sido achicado, pese a que en los discursos de funcionarios era presentado como una alternativa eficaz para atender las causas de la violencia, disminuir la incidencia delictiva y enfocarse en los jóvenes, principal grupo de víctimas del delito.
Hasta ayer Gobernación no había hecho ningún pronunciamiento respecto del proyecto presupuestal para 2017.
Por otra parte, el plan de presupuesto da cuenta de los proyectos de inversión delineados antes de 2016 –con un costo total de 50 mil millones de pesos–, pero que requieren seguir alimentándose de recursos cada año, como la compra de drones y vehículos especiales para la Gendarmería; la adquisición de armamento especializado, y modificaciones al penal federal de El Altiplano.
Igualmente están en curso obras para la construcción, rehabilitación y equipamiento de otros penales (Papantla y Tres Marías, sólo por mencionar dos); compra de sistemas de aire acondicionado para la Policía Federal (incluidas oficinas en la Ciudad de México), y adquisición de equipo científico y tecnológico para tareas de seguridad.
Fuente: La Jornada