Naya Rivera –que se hizo famosa por su papel de Santana López en la exitosa serie Glee– cuenta en su autobiografía que mientras rodaba la comedia musical de la cadena Fox, decidió someterse a un aborto, a finales de 2010.
La actriz de 29 años relata en su libro Sorry Not Sorry: Dreams, Mistakes and Growing Up que a los pocos días de terminar su noviazgo con el actor Ryan Dorsey para centrarse en su carrera, se enteró de que estaba embarazada y, en absoluto secreto, decidió abortar.
“El mundo se paró y me quedé en blanco durante un minuto, después me pregunté: ‘¿Qué está pasando?’. Nunca tuve ninguna duda sobre el aborto”, admitió.
Rivera y Dorsey retomaron la relación años más tarde y se casaron en 2014. Ahora son padres de un bebé de casi un año, Josey Hollis.
La estrella se refiere en sus memorias al momento que vivió cuando tuvo que contarle la decisión que había tomado mientras estuvieron separados.
“Fue muy estresante. Obviamente no sabía cómo iba a reaccionar. Había pasado mucho tiempo. Me dijo una de las mejores cosas que cualquier hombre en esa situación podría haber dicho”, confesó la intérprete en una entrevista con Entertainment Tonight sin revelar la respuesta de su marido.
Durante el tiempo en el que estuvo separada de Dorsey, la actriz fue pareja del actor Mark Salling, Puck en Glee, y el rapero Big Sean.
Rivera dice que tampoco olvidará el día en que se enteró de la muerte de su compañero de elenco Cory Monteith por una sobredosis en 2013.
Información de Vanguardia