Organizaciones civiles de ambos lados de la frontera anticipan que la crisis por el alto número de extranjeros que llegan a Tijuana para solicitar asilo en Estados Unidos va a agudizarse, porque la ola de migrantes saturó los refugios y se espera que miles más lleguen a la región.
“Esto no va a parar”, sentenció en conversación con Excélsior el padre Pat Murphy, director de la Casa del Migrante de Tijuana, “acabo de salir de una reunión donde se nos informó que en Brasil ya hay entre siete y ocho mil haitianos que vendrán en las próximas semanas y meses”.
A esa ola de haitianos se suman los miles que ya se encuentran en tránsito por países de Centro y Suramérica desde Brasil, pero no son sólo los miles de haitianos, sino también africanos, sur y centroamericanos, de Oriente Medio, e incluso de países de Europa del este.
“Urge que se declare una crisis humanitaria para que México reciba la asistencia que necesita y nosotros podamos hacer frente a la situación; esta migración inesperada de miles de personas rebasa la capacidad de todos los refugios”, explicó el padre Murphy.
El Ejército de Salvación y la Casa de la Madre Asunta, dos refugios para hombres y mujeres migrantes, respectivamente, coincidieron en que el alto número de extranjeros de distintas nacionalidades rebasó la capacidad de las organizaciones y ahora la mayoría de los migrantes mexicanos, incluidas familias, han tenido que permanecer en las calles de Tijuana.
EL PROBLEMA
A Tijuana llegan autobuses completos de migrantes de diversas nacionalidades en viajes con escalas o directos desde la frontera con Guatemala. En una semana pueden llegar cientos, pero el gobierno de Estados Unidos solo recibía a 50 migrantes que solicitaban asilo por día y últimamente aumentó la cuota a cien.
“Llegan miles, pero pasan unos poquitos cada día”, dijo Said, un haitiano en un desayunador para indigentes en Tijuana, “es como un reloj de arena; nos dicen que todos vamos a pasar, que tengamos paciencia”.
Ginger Jacobs, una abogada de migración que asesora a organizaciones civiles y a migrantes en San Diego, explicó a Excélsior que “de las seis garitas que unen a California con México, sólo la de San Ysidro tiene capacidad para atender solicitudes de asilo y espacio disponible para los solicitantes, “pero su capacidad máxima es de 200 personas, y cada migrante que ingresa a la garita a solicitar asilo permanece dentro de esas instalaciones en promedio tres días”.
PRIVILEGIADOS
Entre los miles de migrantes que aguardan para pasar a la garita de San Ysidro a solicitar asilo, los haitianos, al menos, tienen a su favor el compromiso del gobierno de EU por
atender sus solicitudes de asilo.
Fuente: Excélsior