El duelo entre Boca Juniors y Olimpia por la Copa Pachamama terminó en un bochorno inesperado cuando los jugadores del club paraguayo se retiraron de la cancha en reclamo por las fallas arbitrales, informó la Agencia AP.
“La copa que se la lleve el árbitro”, declaró el dirigente de Olimpia, Raúl Silva, tras el abrupto final.
Realmente pensamos que por el mal arbitraje llegamos a esto”.
La Copa Pachamama quedó en la ciudad de Jujuy, escenario del partido que estaba empatado 2-2 la noche del domingo, porque no hubo un ganador.
Los jugadores del Olimpia no toleraron la decisión del árbitro argentino Fernando Espinoza, que cobró un penal inexistente por una supuesta mano de Alexis Rolín sobre la hora del encuentro. El disparo de Gustavo Bou fue detenido por el portero Víctor Centurión, adelantado.
El silbante determinó que penal debía ser repetido y Bou convirtió. En medio de las protestas del Olimpia, el capitán Claudio Vargas fue expulsado, por lo que todo el equipo paraguayo decidió retirarse de inmediato. Restaban pocos segundos y si el resultado obligaba a definir al ganador de la copa por la vía de los penales.
“Gran partido de Olimpia, una lástima el resto”, declaró el presidente de Olimpia, Marco Trovatto, en su cuenta de Twitter.