El posible lanzamiento de una candidata indígena para la contienda de 2018 levantó críticas, en un primer momento, de Andrés Manuel López Obrador, presidente del Morena, quien recordó que en 2006 el subcomandante Marcos llamó a no votar por él. Sin embargo para analistas consultados por SinEmbargo una candidatura con las características planteadas tendrá un fuerte valor simbólico para la mujer indígena, pero al fina terminará por fracturar el voto opositor.
Una candidata emanada de Congreso Nacional Indígena (CNI) no tendrá posibilidades reales de ganar la Presidencia de la República en 2018, sí generará una carga simbólica positiva para las mujeres indígenas del país, pero dividirá en voto de oposición que podría beneficiar a partidos como el Acción Nacional (PAN), coincidieron especialistas entrevistados por SinEmbargo.
“No sabemos si en realidad el CNI y el EZNL lo harán, pero la idea me encanta porque creo que realmente los ciudadanos estamos muy cansados de tener siempre, aunque sean independientes, candidatos que están relacionados con los partidos que han tenido puestos públicos con problemas de corrupción. Cuando la candidata sale del EZNL y CNI hablamos de personas que tienen experiencia en hacer gobierno, en mandar obedeciendo; es una nueva forma de participar y tomar decisiones”, dijo Eugenia Legorreta Maldonado, coordinadora del Programa de Interculturalidad y Asuntos Indígenas de la Universidad Iberoamericana.
El CNI y el Ejercito Zapatista de Liberación Nacional (EZNL) anunciaron el pasado 14 de octubre, en el marco del Quinto Congreso Nacional Indígena, que lanzarán una candidata independiente para competir por la Presidencia.
“Considerando que la ofensiva en contra de los pueblos no cesará, sino que pretenden hacerla crecer hasta haber acabado con el último rastro de lo que somos como pueblos del campo y la ciudad, portadores de profundos descontentos que brotan también en nuevas, diversas y creativas formas de resistencias y de rebeldías es que este Quinto Congreso Nacional Indígena determinó iniciar una consulta en cada uno de nuestros pueblos, para desmontar desde abajo el poder que arriba nos imponen y que nos ofrece un panorama de muerte, violencia, despojo y destrucción”, dice el comunicado conjunto difundido ese día.
Eugenia Legorreta consideró que el EZLN buscará comparar y colocar al nivel de candidatas de partidos políticos a una mujer indígena, como una forma de provocación.
“Es un cambio interesante. El EZLN lo hace como una provocación, no sé de fondo la razón, yo espero que las personas en las zonas urbanas reflexionemos por quién estamos votando y a quién está beneficiando”, dijo.
Ivonne Acuña Murillo, académica del Departamento de Ciencias Sociales y Políticas de la Universidad Iberoamericana, resaltó que la importancia de la candidatura se circunscribe en el ámbito simbólico.
“Es mostrarle a las demás mujeres, y en este caso particular a las demás mujeres indígenas, qué pueden hacer y hasta dónde pueden llegar, y que pueden participar en política como cualquier varón y como cualquier mujer de otras culturas. Desde ese punto de vista siempre será positivo”, opinó.
Ambas expertas coincidieron en que si bien la propuesta es interesante, la candidata independiente no tendrá posibilidades reales de ganar la Presidencia.
Para Legorreta Maldonado la intención real del EZNL no es ganar las elecciones, sino dar una “sacudida” a la clase política del país. La propuesta de la organización no contará con el aparato político que se requiere para ganar unas elecciones, añadió.
“Quien lo tiene [el aparato político] actualmente es el PRI [Partido Revolucionario Institucional], pero también los otros partidos: tanto el PAN [Partido Acción Nacional] como el PRD [Partido de la Revolución Democrática] y ahora Morena [Movimiento Regeneración Nacional] llevan trabajando muchos años en tener clientes de diferentes maneras”, explicó.
Acuña Murillo agregó que la candidata del EZLN fragmentará el voto opositor para beneficio del PAN, debido a que el PRI se encuentra en una crisis de credibilidad y popularidad.
“Esta candidata no tendría ni una posibilidad real de ganar la Presidencia; a la persona en particular probablemente le beneficiaría porque saltaría a la esfera pública y pudiera ocupar otros cargos, como una diputación, pero es seguir fragmentando el voto y eso me parece que tiene sus riesgos. Tenemos presidentes que llegan al cargo con 30 por ciento de la votación”, dijo.
FRAGMENTACIÓN DEL VOTO OPOSITOR
Un día después del anuncio del EZLN, Andrés Manuel López Obrador, presidente de Morena, criticó la propuesta.
“Desde hace 10 años ellos no apoyan a nuestro movimiento, [y] al contrario en el 2006 llamaron a no votar por nosotros”, recordó el tabasqueño.
En su cuenta de Twitter López Obrador se refirió al EZLN como “el huevo de la serpiente” en 2006. “Luego, muy ‘radicales’ han llamado a no votar y ahora postularán candidata independiente”.
Acuña Murillo recordó que el subcomandante Marcos rompió con todos los partidos políticos, en especial con la izquierda. Es “sospechoso”, agregó, que luego de años de inactividad política propongan a una candidata que sí fracturará el voto.
“Desde el punto de vista político el objetivo del EZLN de postular a una mujer, se hace sospechoso; porque todo el año está en silencio y de repente, sobre todo cuando hay elecciones, Marcos protesta como cuando habló mal de la izquierda política y despotricó contra Andrés Manuel. Sí le resta votantes a la izquierda, la crítica que se hace es que va a distraer, va a fragmentar más el voto opositor. La izquierda política está en crisis porque ya está fragmentada, si no van en coalición será muy difícil que lleguen a tener posibilidades reales de llegar a la Presidencia”, explicó.
Gustavo López Montiel, experto en partidos políticos del Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM), consideró que la candidata, con posibilidades nulas de ganar la elección, dividiría el voto.
“No necesariamente el voto de la oposición al PRI. Pensando que fuera Margarita Zavala [Gómez del Campo] por el PAN, habría quienes pensarían en votar por una mujer que no fuera Margarita. Pero en ese aspecto AMLO es más proclive al voto del EZLN. Su voto podría irse con una candidata independiente, pero habría que ver hasta qué punto sería posible, porque Andrés Manuel también tiene su voto duro”, detalló.
EL PAN SERÍA EL BENEFICIADO
Sin embargo para Ivonne Acuña es claro que la fragmentación del voto beneficiará al PAN solo o en alianza con el PRD.
La académica sustenta su hipótesis en que el PRI, aunque tiene un poderoso voto duro y utiliza de manera hábil las coaliciones con los partidos llamados “satélites”, como el Partido Verde Ecologista de México (PVEM) el Partido Nueva Alianza (NA) y hasta el Partido del Trabajo (PT) en algunos casos, pues éste último está en caída en popularidad e intención de voto.
“Pudiera ser el PAN el beneficiado, porque se está viendo que quizás la competencia estaría entre el PAN y Morena; en este contexto, si el PRD va con el PAN, como ya fue en las gubernaturas, sería muy difícil vencer esa coalición en 2018. Pero aunque el PAN vaya solo, se beneficiara de la fractura del voto de izquierda”, argumentó.
López Montiel descartó la posibilidad de que PRD y PAN vayan en alianza en la contienda por la Presidencia de la República. El Sol Azteca requiere votos solo para lograr diputaciones y no le convendría una alianza, consideró.
En cuanto a la caída del PRI, el analista consideró que aún es temprano para conocer hasta qué punto se debilitó el partido.
“Hasta que no haya candidatos definidos. Si hoy fueran las elecciones a lo mejor el PRI perdería, pero no sabemos. Hay que ver si no sucede el efecto de 2016, que una buena parte del voto se fue a los partidos más pequeños, pero que iban aliados con los grandes. No hay que perder de vista que el MC [Movimiento Ciudadano] y hasta el Verde incrementaron su votación en algunos estados”, explicó.
Eugenia Legorreta descartó que la intención del EZLN sea dividir el voto, y consideró como “muy ridículo” que ése sea el objetivo de la candidatura que plantea.
“No tiene ningún sentido, ¿quién ganaría? Nadie. Además es muy probable que en la medida que se vaya acercando el 2018, veamos otras tantas candidaturas ciudadanas y finalmente el voto se va a dividir, probablemente sí estará mucho más atomizado que en las elecciones pasadas, porque tendremos muchas más opciones. Para nada creo que la apuesta de esta candidatura sea dividir el voto. Sería muy ridículo tener ese objetivo”, dijo.
Sin Embargo