Tras la información vertida públicamente sobre la supuesta contaminación en el Hospital General de Zona (HGZ) número 23, en Hidalgo del Parral, la Dirección del nosocomio aclaró que se trató de un problema menor registrado en un séptico de la unidad, el cual fue atendido de manera inmediata, por lo que resaltó no se puso en riesgo la salud de los pacientes, así como tampoco la funcionalidad del servicio.
En ese sentido, aseguró que no se presentaron derrames de aguas negras, como trascendió públicamente, toda vez que se realizaron de manera oportuna los trabajos y acciones para evitar contaminación alguna.
Asimismo, informó que no se suspendieron los servicios a ningún derechohabiente, ya que, recalcó, el inconveniente se resolvió de manera inmediata, lo que contribuyó a que el Hospital General de Zona número 23 funcionara de manera habitual en todas sus áreas.
Finalmente, hizo hincapié en que el Instituto Mexicano del Seguro Social se encuentra permanentemente monitoreando las áreas de la unidad, a fin de mantener la calidad en el servicio, en beneficio de su derechohabiencia.