El momento en que Emma Newman y Scott Garside tuvieron a su niña en brazos quedaron totalmente sorprendidos, era su primera hija, por lo que no podían ocultar sus nervios, pero no todo andaba bien, el ambiente se sentía tenso, ¿qué estaba sucediendo? los médicos se hablaban entre ellos en voz baja, al mismo tiempo que le decían a Emma que no se preocupara, que todo iba a estar bien, y que sólo necesitaban realizarle algunos estudios a su pequeña Charlotte.
Minutos después ya tenían un diagnóstico, pero no había aún un nombre para la condición con la que había nacido su hija, era un caso único, la bebé pesaba tan sólo medio kilo y medía 20 cm, tenía una especie de enanismo que aún no había sido identificado.
Era casi imposible que Charlotte viviera más de un año, y con esta amarga noticia se fueron a casa, cobijaron bien a la bebé y durante el camino la madre pensó “¿Qué ropa le pondré?” obviamente la ropa de recién nacido le quedaría muy grande, por lo que no tuvo otra opción que comprarle ropa de muñecas. Charlotte era tan diminuta que cabía en el bolsillo del suéter de su madre y sus pañales medían 10 cm.
A pesar de los duros diagnósticos Charlotte ahora tiene 5 años, sus padres experimentaron momentos de mucha angustia en los que pensaron que perderían a su hija, su sistema era muy frágil y desde muy pequeña le encontraron quistes en el hígado. El primer día que Emma tuvo que dejar a su adorada hija en el jardín de niños no podía evitar sentirse muy preocupada, temía que algún niño la lastimara jugando, pero sus maestros la cuidaron muy bien.
Sólo bastaron unos dos días para que Charlotte se convirtiera en la más querida entre sus compañeros, a la corta edad de 5 años ya es considerada la niña más pequeña del mundo, midiendo sólo 68 cm.
Con el paso de los años, Emma y Scott sólo pueden agradecer a la vida porque su hija ha superado muchas complicaciones y momentos difíciles y desean que cada día despierte con una hermosa sonrisa anhelando ver un nuevo día. La pequeña se ha convertido en un hermoso ser que habita un pequeño cuerpo y que ha llenado a sus padres de esperanza y ganas de vivir, aunque también a sus maestros y compañeros, les hace ver lo maravillosa que es la vida y les da aliento para continuar adelante. ¡Esperamos que su pequeño corazón siga latiendo por muchos años más!
Información de: Agencias