La futura primera dama de EE.UU., Melania Trump, y su hijo Barron no se mudarán a la Casa Blanca tras la asunción de Donald Trump en enero, informa el periódico ‘New York Post’.
La esposa del presidente electo, de 46 años, y su hijo, de 10 años, permanecerán en el lujoso ‘penthouse’ de la Trump Tower en Nueva York, para que Barron pueda continuar asistiendo a su escuela privada en Manhattan, informa una fuente cercana al equipo de transición de Trump, citada por el medio.
“Melania es extremadamente cercana a Barron”, afirmó la fuente al periódico. “La campaña ha sido difícil para Barron, y ella espera mantener al mínimo las perturbaciones”, por lo cual no quiere cambiar a su hijo de colegio a mitad del año académico.
Asimismo, otra fuente afirma que Melania Trump irá a la Casa Blanca cada vez cuando sea necesario, porque está dispuesta a cumplir con los deberes de la primera dama. Sin embargo, su enfoque principal actualmente es su hijo, porque es “una madre dedicada”.
El mismo Trump confirmó el domingo la noticia mientras se dirigía junto al secretario de Estado de Kansas, Kris Kobach, a una reunión en su campo de golf en Nueva Jersey. El presidente electo afirmó a los periodistas que Melania y Barron se trasladarían a la Casa Blanca “justo después de que finalice el año escolar”.
Fuente: RT