Ya sea volando alrededor del mundo en un Boeing 737 o haciendo posturas perfectas de yoga, Malin Rydqvist raramente se queda en el piso.
Mientras a la mayoría le cuesta un gran esfuerzo hacer la más sencilla de las posturas, a esta piloto obsesionada con el yoga, si no es en la cabina, siempre luce sus perfectas posturas en impresionantes escenarios de exóticas locaciones que visita por su trabajo.
La multitalentosa Malin, de 29 años, quien nació en Suecia, pero vive en Croacia, de inmediato deja su uniforme y lo cambia por tops y leggins tan pronto aterriza. Y comparte fotos de ello en su Instagram (@flymeyoga) para placer de sus 45 mil seguidores.
Muchas de sus fotos la muestran ejecutando complicadas posturas en bellos y singulares escenarios.
Vanguardia