En el marco del Día de los Derechos Humanos, la coordinadora del Grupo Parlamentario del PRI en el Congreso local, Karina Velázquez Ramírez, exhortó a los titulares de los poderes públicos del estado, organismos desconcentrados, descentralizados y autónomos, empresas paraestatales, autoridades municipales y las instituciones y agrupaciones privadas y sociales del estado de Chihuahua en materia de Derechos Humanos a fin de que estos sean salvaguardados a través de las siguientes propuestas:
1. Formular políticas de respeto y garantías de acceso a los derechos humanos y establecer programas de comunicación y cultura acerca de los mismos dirigidos a la población;
2. Capacitar al personal que labora en las dependencias gubernamentales del estado para que conozcan y comprendan el alcance y significación de una sociedad de derechos y la necesidad de anteponer la dignidad humana de los individuos, los grupos, las mujeres, los niños, niñas y adolescentes, los adultos mayores, las etnias y, en general, la integridad comunitaria de la sociedad chihuahuense;
3. Crear o fortalecer dentro de dichas dependencias y organismos, en las oficinas de atención ciudadana o sus equivalentes, un área especial para la protección de los derechos humanos, poniendo énfasis en la protección y defensa de los derechos laborales y de seguridad social de sus propios trabajadores y trabajadoras y en la protección y defensa de los derechos de familia y de erradicación de la violencia contra las mujeres y los grupos más vulnerables de la población.
Velázquez Ramirez dijo que en casi todos los ámbitos de la vida pública, social y privada de los mexicanos se violan, muchas veces en flagrancia e impunidad, los derechos más elementales en las esferas de la familia, de la política, del trabajo, de la educación, de la cultura, de las etnias y de los pueblos y comunidades del país, según se acredita por los estudios internacionales y nacionales que evalúan la situación mundial de los derechos humanos.
Por lo anterior, sostuvo que la sociedad “no hemos transitado de las palabras a los hechos y no se ha formado la conciencia democrática que asuma como compromiso esencial de la existencia colectiva el respeto de los derechos básicos y la dignidad humana de personas y grupos. Justamente por ello es necesario mantener y reiterar la insistencia en el respeto y las garantías para que no se vulneren los ideales de libertad, igualdad, equidad y justicia que merece el ser humano en cuanto ser humano, sin discriminaciones de ninguna especie, en los términos del Artículo 1º de nuestra Carta Magna”.
Dijo que la meta y los objetivos están trazados, pero falta, sin embargo, que todas las instituciones públicas asuman sin prejuicios ni discriminación de ninguna naturaleza, la práctica de dichos derechos básicos y falta también que la cultura de los derechos humanos avive su fuego liberador en las esferas social, privada y familiar de la existencia.
Así, por tanto, en el marco de la conmemoración del 10 de diciembre de 1948, fecha de la Declaración Universal de los Derechos Humanos de la ONU, la legisladora pidió se renueven los compromisos institucionales y sociales para seguir avanzando en su pleno respeto y garantía.