Como ya es costumbre, muchas personas abarrotan los comercios de la ciudad para realizar las compras de última hora antes de celebrar la cena de Nochebuena y la Navidad.
Cientos de capitalinos acudieron al centro de la ciudad por las llamadas “compras de pánico” a fin de surtirse de regalos y productos para preparar la cena navideña.
En muchos cosas, los compradores prefieren esperar al último día con la intención de encontrar tiendas vacíos, mientras que otros simplemente no contaron con el tiempo suficiente para hacerlo previamente.
Debido a esto, muchos comercios que, por lo regular cierran durante la tarde los fines de semana, permanecieron abiertos para rematar sus mercancías y aprovechar estas fechas de gran afluencia.