Un niño de dos años falleció y 11 personas fueron atendidas en hospitales por intoxicación, en Cancún, presuntamente a consecuencia de haber comido pollo descompuesto que habrían comprado en el expendio denominado “Asadero El Pollo”, en el décimo municipio del estado, Bacalar.
El jefe de la Jurisdicción Sanitaria 1, con sede en Chetumal, Francisco Lara Uscanga, confirmó la muerte del menor y precisó que las demás personas recibieron atención médica de urgencia, tanto en el Hospital Comunitario de Bacalar como en el Hospital General de Chetumal.
La tragedia inició el domingo al mediodía cuando un padre de familia compró pollos asados “estilo Sinaloa”, para consumir en familia, y por la noche todos sintieron náuseas, vómito y un fuerte dolor abdominal, mismos síntomas que presentaron los integrantes de otra familia que se trasladaron al hospital de Bacalar.
Por la gravedad de un niño de dos años, fue trasladado al Hospital General de Chetumal, pero en el camino falleció.
Por todo lo anterior, la representación de la Cofepris procedió a la clausura del negocio a pesar de que sus empleados arremetieron contra ellos y contra representantes de medios de comunicación.
Además inició un procedimiento de revisión tomando muestras de los alimentos y del agua que ahí se usaban, para enviarlas al laboratorio de la Secretaría Estatal de Salud. De acuerdo con los resultados, el dueño se haría acreedor a una multa que podría ir de los 500 a los 5000 salarios mínimos e incluso el “Asadero El Pollo” podría ser clausurado definitivamente.
De entrada, las autoridades señalaron irregularidades como la falta de tarjetones de salud y una evidente falta de capacitación del personal, en lo que a prácticas de higiene y sanidad en la preparación de alimentos se refiere.