El 2017 acaba de llegar pero una empresa de fabricación ya está viendo 45 años al futuro. Acronic, una compañía de materiales científicos, ha imaginado un rascacielos de 4.8 km construido de materiales que están en desarrollo, incluyendo superficies que absorben en esmog y balcones retráctiles.
La torre fue tramada como parte de la campaña más grande de la compañía conocida como Los Supersónicos, en homenaje a la caricatura de 1962 que supuestamente sucedía en el 2026. Los ingenieros de Arconic trabajaron junto a futuristas para imaginar tecnologías que serán más útiles dentro de unas décadas.
Uno de los materiales más emocionantes del proyecto es EcoClean, que funciona con ayuda de la luz y vapor de agua, que se mezclan con los químicos del revestimiento para producir radicales libres. Estos átomos hacen que el material se autolimpie y purifique el aire que le rodea.
Otra innovación está en la ventanas. El nuevo diseño llamado Bloomframe, se trata de una ventana motorizada que se convierte en un balcón de vidrio en menos de un minuto.
En vez de gastar el doble del presupuesto en materiales para construir bordes y ventanas separadas, Arconic quiere invertir en componentes flexibles que puedan hacer de los edificios algo más que gigantes estáticos.
Los rascacielos construidos de materiales impresos en 3D pueden estirarse más de 4.8 kilómetros hacia el cielo, declaró la compañía.
Mientras se inicia el proyecto, Arconic trabaja en formas de empujar los límites de lo que los rascacielos modernos pueden hacer y como se ven. Utilizando impresión en 3D podrán crear muchas estructuras que actualmente no son realizables y podrían aguantar los rápidos vientos y climas únicos a dicha altura.