Este 8 de febrero se cumplen 48 años de la caída sobre la Tierra del meteorito Allende, la más grande condrita carbonácea conocida, y que es conocido como el “meteorito más estudiado del mundo”, informó Europa Press.
El bólido fue observado en la madrugada sobre el estado mexicano de Chihuahua. Debe su nombre al poblado mexicano homónimo donde cayó. Después de desintegrarse en la atmósfera se realizó una exhaustiva búsqueda para recolectar sus fragmentos.
Se cree que la roca original debió haber tenido el tamaño de un automóvil viajando a través del espacio con rumbo a la Tierra a poco más de 15 km por segundo.
A primera hora de la mañana del 8 de febrero de 1969 al norte de México, cerca de Pueblito de Allende, un inmenso bólido se acercó desde el sudoeste y encendió el cielo describiendo una trayectoria de decenas de kilómetros. Explotó y se desintegró produciendo miles de fragmentos de corteza fundida.
Este es un típico fenómeno en las caídas de grandes rocas a través de la atmósfera debido al repentino efecto de la resistencia al aire. El Allende se ha convertido en uno de los meteoritos más distribuidos proveyendo una gran cantidad de rocas como material de estudio, muchos más de cualquier otra caída de condrita carbonácea, conocida hasta ahora.
Es un meteorito clasificado dentro del grupo de las condritas carbonáceas, siendo este el más grande en su tipo. Los meteoritos de este tipo son de gran interés científico dado que su estructura se remonta a los mismos orígenes del sistema solar. Antes de la caída del Allende los meteoritos de este tipo eran raros. En 2012 se encontró en Allende un nuevo mineral, un óxido de titanio, que fue denominado pangüita.