Una mujer rusa de 21 años de edad, está en “estado grave” después de dispararse accidentalmente mientras posaba para una selfie con una pistola que se cree, fue dejada por un guardia de seguridad.
Ella encontró la pistola 9 mm en su oficina de Moscú y, mientras se tomaba la selfie con una mano, presionó accidentalmente el gatillo de la pistola a quema ropa.
La mujer fue internada en el hospital Sklifosovsky en Moscú, donde se reporta en “estado grave.”
El incidente fue confirmado por la policía el viernes, pero los hechos ocurrieron un día antes y la policía está investigando cómo la mujer obtuvo el arma.
La Policía de Moscú dijo que se cree que un guardia de seguridad dejó la pistola en la oficina dos semanas antes.
El propietario de la pistola podría enfrentar hasta seis meses de cárcel por el uso negligente del arma, según medios locales.
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