El régimen de Israel cerró el jueves la investigación sobre el ataque de las fuerzas israelíes contra una playa en la Franja de Gaza que dejó a 4 niños muertos.
“Tras revisar los resultados de la investigación, el ejército ha llegado a la conclusión de que el ataque respeta las leyes internas israelíes y los reglamentos internacionales”, dijo Peter Lerner, portavoz del ejército israelí.
Seguido del ataque del 16 de julio de 2014 sobre una playa en la Franja de Gaza que se saldó con la vida de 4 niños gazatíes, el régimen israelí, bajo presión internacional, se vio obligado a iniciar una investigación sobre la muerte de los niños, no obstante, el jueves decidió no presentar cargos contra los militares israelíes implicados y cerró la investigación.
El ejército israelí trató de justificar la decisión de dar fin a la investigación alegando que una cabaña en la playa servía como una sede de operaciones de los Comandos Navales del Movimiento de Resistencia Islámica Palestina (HAMAS) y que no había visto a ningún civil a la hora de lanzar los cohetes.
No obstante, tanto los reporteros que se presentaron en el lugar como las evidencias recaudadas de dicha cabaña descartan la versión del ejército israelí dado que en la cabaña no había nada a parte de instrumentos y accesorios que se usan para pescar.
“Los reporteros que se encontraban en el lugar justo después del ataque, incluyendo a un reportero de The Guardian (periódico británico), vieron a una pequeña y arruinada cabaña pesquera que contenía unos pocos instrumentos”, escribió Peter Beaumont, corresponsal de The Guardian, que se encontraba en el lugar de los hechos.
El ataque en cuestión se llevó a cabo durante la ofensiva israelí de 51 días a la asediada Franja de Gaza que durante su curso, desde el 8 de julio de 2014 hasta el 26 de agosto del mismo año, dejó según fuentes palestinas a 2310 personas muertas, 10.626 heridas, y dejó devastado al enclave costero.