Santiago De la Peña, secretario del Ayuntamiento capitalino, dejó claro que se ha mantenido contacto directo con grupos y personas en lo individual, dedicadas al sexoservicio por lo que se informa que el Municipio no pretende reubicarlas en una zona de tolerancia rumbo a las “Curvas del Perico”.
El funcionario municipal, expresó que el diálogo ha sido con hombres y mujeres que se dedican al trabajo más antiguo, por lo que resaltó que por respeto a la identidad se evita decir de qué zonas trabajan estas personas.
Afirmó que Chihuahua tiene un padrón de por lo menos 250 sexoservidoras y sexoservidores avalados por Gobernación Municipal. Recalcó que la intención del alcalde, Javier Garfio, a través del Instituto Municipal de la Mujer, es brindarles oportunidades de empleo, creación de sus propias empresas a fin de que ellas y ellos se sientan motivados para buscar otras opciones de trabajo.
Aclaró que una vez operando el Complejo Judicial del Estado que abarca la zona entre Niños Héroes y Juárez, las meretrices deberán ser reubicadas, pero no a una zona donde se sientan inseguras.
“Es una versión falsa, es una especulación que parece que tiene como propósito infundir la angustia y preocupación de quienes ejercen este trabajo y no tiene sentido. ¿Qué es lo que queremos hacer?- acercarnos a este grupo que pudieramos considerar además como un grupo vulnerable y poner entre las facultades que tiene las capacidades la autoridad municipal, poner a disposición opciones para que pudieran variar su manera de sustento diario”, señaló.
Cabe recordar que las Curvas del Perico es una zona alejada de la ciudad rumbo a Ciudad Juárez. En semanas pasadas Entre Líneas entrevistó a sexoservidoras y comentaron que se sentían inseguras, pues enviarlas para allá sería enviarlas “al matadero”, por lo que el Ayuntamiento el mes pasado sostuvo la última reunión con ellas para aclarar esta situación y definir que para allá no serán enviadas.