El conflicto en Yemen, liderado por Arabia Saudí, que se intensificó gravemente hace tres meses, provocó que millones de niños queden expuestos a enfermedades que pueden prevenirse, pero que ahora amenazan sus vidas, según alertó el martes la Unicef.
De acuerdo con el el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef, por sus siglas en inglés), la interrupción de las campañas de vacunación ha puesto a 2,6 millones menores de quince años en peligro de contraer sarampión, una enfermedad que se propaga rápidamente y puede ser fatal en situaciones de conflicto y entre grupos de desplazados.
La neumonía es otra enfermedad que amenaza a 1,3 millones de niños, que no puede ser tratada en numerosos hospitales debido a que han cerrado o funcionan de forma parcial por los bombardeos.
De igual manera, otra afección que puede afectar a 2,5 millones de niños es la diarrea, por las dificultades para contar con agua potable, por la pésima situación del saneamiento básico y la escasez de sales para la rehidratación oral.
“Los niños no son vacunados, sea porque los centros de salud no tienen electricidad o el combustible que necesitan para mantener las vacunas refrigeradas, o debido a que los padres tienen demasiado temor de llevarlos para la vacunación”, explicó el portavoz de la Unicef Christophe Boulierac.
El pasado 26 de marzo, Arabia Saudí inició una ofensiva contra Yemen en un intento por restaurar en el poder al fugitivo expresidente Abdu Rabu Mansur Hadi, un fiel aliado de Riad.
Según la Organización de las Naciones Unidas (ONU), dicha agresión ha provocado la muerte de al menos 2800 personas, además de herir a otras 13 mil.
HispanTV