COMO BARREDORA ES como quiere terminar el rector de la UACh el último tramo de su gestión. Esta semana de un plumazo eliminó a tres funcionarios de primer nivel en su administración. El Secretario General, a su Abogada General y de pasada a la titular de Comunicación Social.
Los datos son pocos, escuetos y de plano cortos. Pero al menos el caso de Diana Valadez Luna tiene mucha historia y se vale decir los por qué.
Por supuesto que el pretexto es el proceso previo de elecciones para tener nuevo rector. Este mes de noviembre incluso deberán sentarse las bases por medio del Consejo Universitario para ir delineando los mecanimos de control y acceso a las votaciones universitarias. El reloj corre en contra de los que traen aún suelto ese proceso.
También no hay que olvidar que Raúl Sánchez Trillo nada más le faltó apellidarse Corral para que no quedara la menor duda, con sus acciones y definiciones diarias, que para él se acabó el corrido desde el mes de junio pasado. Solamente que no le habían notificado.
Todo inicia con los nombramientos de los hoy expulsados del juego, los cuales no solamente fueron para complacer y conservar alianzas con el (des)gobierno de Javier Corral, así como con personajes que abiertamente son rivales políticos de la hoy gobernadora Maru Campos y buscaron afanosamente que no solamente no fuera candidata, se esforzaron por mucho tiempo que ni a Presidenta Municipal llegara, pero como ella misma lo dijo, se la pasaron a “Pérez Prado”.
Hoy esas decapitaciones, así como la que eventualmente hiciera hace alguna semanas el rector Fierro en contra de Lucía Chavira, esposa del exalcalde priista y excandidato a ese mismo cargo pero por Morena, Marco Quezada, no es más que lo mismo. Llevar ofrendas de sacrificios políticos al otro lado de la Plaza Hidalgo.
El operador de la UACh designado por Palacio de Gobierno se llama Mario Vázquez. Despacha en el piso 16 de la Torre Legislativa, y desde ahí apreció y valoró -sin que esto quiere decir que el rector ya se ganó la aprobación- la decapitación pública.
Además, en el caso de la ahora ex Abogada General de la UACh al igual que el rector Fierro deberán cargar y explicar por qué tardaron años en presentar una denuncia en contra de la Secretaría de Hacienda y de Arturo Fuentes Vélez por jinetearles y desviarles los recursos públicos que les mandaba la federación a la Máxima Casa de Estudios. De hecho la que se presentó en el verano pasado nos dicen que estuvo a destiempo y quizá no proceda. Eso incurre en responsabilidad penal, dicen los leguleyos.
Otros mal pensados opinaron que el llevar tres cabezas como ofrenda de allanamiento a la Tlatoani no sirve de mucho, y si no hay que reocordar que de poco o nada le sirvió al entonces alcalde Marco Quezada hacer lo mismo con la cabeza del famoso Doc Larry Esquivel, ni más ni menos que el cuñado favorito del exgobernador José Reyes Baeza, por esos entonces ya muy alejado compadre del chaparrito ojiverde.
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EL AUMENTO EN la tarifa del transporte público ya es un asunto que trae a varios con el agua hasta el cuello y presurizados, pues un día sí y el otro también, desde el bando de los concesionarios se encargan de mandar señales para que en el Gobierno del Estado caigan redonditos a sus exigencias, sin embargo, la gobernadora Maru Campos fue clara al respecto: si se aumenta el costo del pasaje del camión urbano, el servicio debe mejorar, en resumen, que los dueños de los camiones también le inviertan para que los usuarios también salgan beneficiados, porque el aumento que buscan los angelitos no es enchílame otra, es de entre 11 y 12 pesos nomás por subirse a sus latas con ruedas. Lo que sí es que ya se las sentenció la jefa de la comuna con un dando y dando, pajarito volando.
Pero mientras la exigencia fue realizada públicamente por la Góber, será la semana que entra cuando el Consejo Consultivo de Transporte vuelva a reunirse para analizar las exigencias de los concesionarios, quienes no quitan el dedo del renglón, ya que como nunca dan paso sin huarache, esa fue precisamente su tirada cuando anduvieron apoyando las campañas de la gobernadora Maru Campos y el del hoy alcalde Marco Bonilla, demostrando que el amor y el diésel que gastaron, nunca fueron gratis.
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Y SI DEL alcalde Marco Bonilla se trata, el mozuelo anda montado en los cuernos de la luna, pues a casi dos meses de asumir el cargo, las más recientes encuestas lo colocan en el Top Ten de los presidentes municipales más populares y con mayor aprobación, y cómo no, sí tan sólo en lo que lleva al frente de la Alcaldía de Chihuahua capital, Bonilla ha traído como prioridad el mejorar los servicios para los chihuahuenses y no aumentarles los impuestos, como fue el caso del predial, el cual continuará bajo las mismas tablas, continuando la herencia que le dejó la exalcaldesa y hoy gobernadora Maru Campos.
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CON TODO Y la caída del “Jaguar”, líder criminal en la región noroeste de Chihuahua que operaba para un cártel con mandones sinaloenses, vinculado con la masacre que cobró la vida de nueve integrantes de las familias LeBarón y Langford en los límites de nuestro estado con Sonora, quien no se queda tranquilo, y con justa razón, es el activista Julián LeBarón, el cual ha exigido que junto a los delincuentes y sicarios que le asesinaron a sus familiares, también deberían caer el exgobernador Javier Corral y el exfiscal César Peniche, a quienes acusa de ser omisos y permitir que ese territorio donde fueron masacrados mujeres y niños, los criminases operaran a sus anchas, por lo que continuará insistiendo que a Corral no sólo se le juzgue por inepto y corrupto, sino también porque era tan grillo, pero tan grillo, que lo único que hizo durante su quinquenio fue aspavientos políticos y desgobernar.
Source: Columna