Los cesados por fuga del ‘Chapo’: una dirigió el penal de donde se escapó la primera vez

El secretario de Gobernación Miguel Ángel Osorio Chong dio a conocer el pasado lunes 12 de julio la destitución de tres mandos pertenecientes a la cúpula del sistema penitenciario nacional, luego de que el líder del Cártel de Sinaloa, Joaquín Guzmán Loera alias ‘el Chapo’, se escapó por segunda vez de una cárcel de máxima seguridad.

Una de las cesadas fue la encargada de los centros federales de readaptación social, Celina Oseguera Parra, quien en la década de los noventa fue directora del penal federal de Puente Grande, instalación de donde se escapó por primera vez Guzmán Loera.

Otro de los destituidos, el director del penal del Altiplano, Valentín Cárdenas Lerma, estuvo hasta 2014 al frente del Centro Federal de Readaptación Social (CEFERESO) número 8 ubicado en Sinaloa, entidad considerada el corazón operativo del Cártel del Pacífico que dirige ‘El Chapo’ Guzmán. En dicho penal ya se había registrado un intento de fuga el año pasado.

Juan Ignacio Hernández Mora, comisionado del Órgano Administrativo Desconcentrado de Prevención y Readaptación Social y que también fue removido del cargo, no contaba con experiencia por lo menos en el área de penales federales y aun así fue designado como cabeza de todo el sistema carcelario del país en 2014.

Animal Político, con los datos disponibles públicamente, presenta el perfil de los tres funcionarios ligados ahora por el escape del ‘Chapo’.

Celina Oseguera Parra.
Celina Oseguera Parra es una funcionaria experimentada en el ámbito penitenciario del país. En más de dos décadas ha sido directora de tres penales de alta seguridad (entre ellos los dos de donde ya se fugó Guzmán Loera) y ha llegado a ser la titular de todo el Órgano Administrativo Desconcentrado de Prevención y readaptación Social (OADPRS).

Egresada de la carrera de Derecho por la Universidad de Colima y con maestría en criminalística, ocupó su primer puesto de jerarquía en 1993 cuando fue asignada directora del CEFERESO número 2 Occidente de Puente Grande Jalisco.

Cuando el 22 de noviembre de 1995, luego de un supuesto primer intento de fuga, Guzmán Loera fue cambiado del penal de Almoloya al de Puente Grande en Jalisco, este seguía bajo la dirección de Oseguera Parra, quien a la postre reconocería que el capo estableció “relaciones no convenientes” con funcionarios del centro penitenciario que facilitaron su fuga.

En 2001, año en que Guzmán Loera se escapó, Oseguera ya no seguía al frente de ese penal sino que ocupaba la dirección de la cárcel de Almoloya (antes llamado penal de La Palma y hoy Altiplano) de donde el capo había sido movido previamente.

Los ceses y cambios inmediatos que siguieron en la estructura penitenciara tras el primer escape de ‘el Chapo’ llevaron a Celina Oseguera a ser nombrada titular del Órgano Administrativo Desconcentrado de Prevención y Readaptación Social (OADPRS), cargo en el que permaneció un año, y que volvería a repetir en el 2007 por otro periodo de un año.

Antes de volver al sistema penitenciario federal, Oseguera se desempeñó a nivel estatal en varias estructuras penitenciarias.

Uno de sus cargos más prolongados, por casi cinco años, fue el de subsecretaria del Sistema Penitenciario del Distrito Federal, es decir, era la titular de todos los reclusorios de la capital del país. Durante su administración prácticamente la población de reos en la capital se duplicó hasta llegar a más de 40 mil.

Durante su administración enfrentó varias situaciones de crisis y críticas. Por ejemplo, en febrero de 2009 se descubrió que se habían dado facilidades en el penal de Santa Martha Acatitla para que Sandra Ávila Beltrán, alias ‘La Reina del Pacífico’, recibiera visitas de personas sin autorización que supuestamente le brindaron un tratamiento estético.

Otro ejemplo fue el de enero del 2013 cuando se publicó que durante su gestión Oseguera contrató a personas dentro del área de seguridad penitenciaria sin que estos hubieran aprobado los exámenes de control de confianza.

En el arranque de la administración del presidente Enrique Peña Nieto, Oseguera Parra regresó al sistema penitenciario federal primero con un cargo directivo y luego ya como coordinadora de los centros federales de readaptación social.

Fue precisamente durante esta nueva fase de su gestión en los CEFRESOS, en agosto de 2013, cuando Rafael Caro Quintero salió del penal federal de Puente Grande. No se trató de una fuga sino de una decisión de un tribunal federal que determinó echar abajo la sentencia que se le había impuesto por el homicidio de un agente de la DEA.

Valentín Cárdenas Lerma.
De profesión psicólogo, la experiencia de este funcionario en el sistema penitenciario es de más de una década, según lo declarado el pasado 13 de julio por el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, durante la conferencia de prensa en la que se dio a conocer, entre otras cosas, su destitución.

Animal Político no pudo ubicar públicamente un currículum o perfil de su trayectoria. En la página www.servidorespublicos.gob.mx, que contiene, entre otras cosas las declaraciones patrimoniales y perfiles de los servidores públicos, no fue posible localizarlo.

Pero por notas informativas se identifica a Valentín Cárdenas Lerma como director del Centro Federal de Readaptación Social (CEFERESO) número 8 ubicado en Guasave, Sinaloa, cargo que habría ocupado por lo menos hasta enero de 2014, cuando fue cambiado de penal para ocupar la dirección de El Altiplano.

Su llegada al conocido reclusorio de Almoloya ocurrió semanas antes de que Joaquín Guzmán Loera fuera ingresado en dicho centro tras su recaptura en febrero de 2014 y en el que permaneció hasta fugarse el pasado 11 de julio.

De acuerdo con datos oficiales del Órgano Administrativo Desconcentrado de Prevención y Readaptación Social durante en 2013, con Cárdenas Lerma al frente, se presentaron 133 incidentes de distinta índole en el CEFERESO número 8, entre ellos 41 riñas, un intento de suicidio, 12 agresiones a terceros, entre otros.

En 2014, cuando Cárdenas ya había dejado la dirección de este centro penitenciario, los incidentes bajaron a 98, aunque se presentó un intento de fuga, que según las investigaciones se había planeado varios meses atrás.

En cambio, en el CEFERESO número 1 del Altiplano hubo 142 incidentes de todo tipo durante 2014, un incremento de 69% en comparación con el año pasado.

Cabe señalar que la Procuraduría General de la República (PGR) tiene identificados entre los principales sospechosos de la fuga de ‘El Chapo’ a Valentín Cárdenas Lerma, quien fue trasladado a la SEIDO para que rinda declaración. Las investigaciones apuntan a que el capo o sus cómplices tuvieron acceso a información privilegiada del centro federal.

Juan Ignacio Hernández Mora.
El depuesto titular del Órgano Administrativo Desconcentrado de Prevención y Readaptación Social no contaba con experiencia amplia en temas de operación o administración de centros penitenciarios federales, como lo evidencia la información sobre su perfil, que puede consultarse en el portal www.servidorespublicos.gob.mx.

Hernández Mora, doctor en Ciencias Políticas por la Universidad Autónoma de Madrid, se desempeñó del año 2000 al 2005 como secretario técnico del Banco Nacional de Comercio Exterior. Posteriormente, de 2005 a 2011 fue secretario Ejecutivo del Sistema Estatal de Seguridad Pública en Quintana Roo y de 2011 a 2013 se desempeñó como subprocurador de justicia también en Quintana Roo.

Ya en el actual sexenio, el funcionario llegó al gobierno federal donde se le designó Director General de Vinculación y Seguimiento del Sistema Nacional de Seguridad Pública. Fue apenas en junio de 2014 cuando se le nombró comisionado del Órgano Administrativo Desconcentrado de Prevención y Readaptación Social, o lo que es lo mismo, la máxima autoridad de los penales del país.

Animal Político publicó que 2014, primer año de la gestión de Hernández Mora, ha sido uno de los peores años en cuanto a incidentes en el sistema penitenciario federal. El balance oficial indica que se presentaron mil 262 incidentes en los centros penitenciarios federales, un incremento de más del 120 por ciento en comparación con lo que se registraba cuatro años antes.

Además, 2014 fue el primer año en la historia del país en que se registraron tres intentos de fuga en tres CEFERESOS distintos, uno de los cuales, el ocurrido en el penal de Ciudad Juárez, resultó exitoso. Y todo ello antes de la fuga de ‘el Chapo’.

Animal Político