El pasado miércoles la moneda mexicana sufrió una caída histórica en relación con la divisa de EE.UU., situándose a un valor de 16,40 pesos por cada dólar, lo que ha provocado cambios significativos tanto en la economía nacional como en la vida cotidiana de los mexicanos.
El tipo de cambio estableció su primer máximo histórico el pasado 10 de marzo, el segundo el 5 de junio y durante julio ha registrado cuatro marcas sin precedentes. El economista jefe de BBVA Bancomer, Carlos Serrano, entrevistado por ‘El País’, explica que la desvalorización de la moneda mexicana afectará principalmente a cinco sectores de la economía:
1. Turismo
La industria turística de México ha crecido significativamente en los últimos años y ha sido la más beneficiada del encarecimiento del dólar, puesto en estas circunstancias los turistas extranjeros encuentran en México una opción asequible para sus vacaciones. Al mismo tiempo, para los mexicanos resulta más caro viajar al extranjero.
2. Exportaciones
Como país exportador a México le beneficia que el tipo de cambio baje, ya que la venta de productos mexicanos adquiere un importante valor en el comercio internacional que utiliza el dólar estadounidense.
3. Inflación.
México importa una buena parte de recursos. Por eso, los productos manufacturados con componentes extranjeros podrían subir de precio, lo que afectaría a los consumidores, cuya capacidad adquisitiva disminuiría.
4. Deuda de empresas trasnacionales mexicanas.
Algunas grandes firmas mexicanas que actúan en el campo del comercio internacional perderán sumas significativas en las operaciones de cambio de pesos a dólares.
5. Ahorros.
Los mexicanos que tienen ahorros en la divisa norteamericana saldrán beneficiados a corto plazo. Por su parte, los que tienen ahorros en pesos tampoco perderán dinero, ya que se considera que la economía mexicana es suficientemente estable y está creciendo por debajo de su tasa potencial, estimada en un 3%.