Agentes policiacos de Ciudad Juárez fueron acusados por un residente de Estados Unidos de aseinato y atentado, luego de sin previo aviso, dispararan en más de 80 ocasiones en contra de una camioneta dando muerte a un joven y dejando a él incapacitado en oído, ojo y brazo, además que lo detuvieron acusándolo de haber empezado la balacera.
La Comisión Estatal de Derechos Humanos emitió recomendación al presidente municipal de Ciudad Juárez, Enrique Serrano EScobar al cual se le informa existen evidencias suficientes para presumir la probable violación al derecho a la vida y la integridad personal a partir del del ejercicio
indebido de la fuerza pública por parte de los agentes de la Secretaria de Seguridad Pública del Municipio de Juárez.
Se pide al alcalde Juárez gire instrucciones para que se instaure procedimiento dilucidatorio en contra de los 4 servidores públicos adscritos a la Secretaría de Seguridad Pública Municipal, que
participaron en los hechos analizados en la presente resolución, en el cual se consideren los argumentos esgrimidos, a efecto de que se determine el grado de responsabilidad en que hayan incurrido.
Se instaure, lo procedente en cuanto a la reparación del daño que les pueda corresponder a las
víctimas de violaciones a derechos humanos identificadas en la presente resolución.
TERCERA.- Se colabore ampliamente con esta Comisión y se le incluya en el Fondo Ayuda, Asistencia y Reparación Integral, prevista en el Título Octavo de la Ley General de Víctimas y, se remitan las constancias que acrediten su cumplimiento.
A continuación la queja presentada por el interno lesionado:
El hombre que fuera baleado y detemindo solicitó al personal de la Comisión acuda al Centro de Reinserción Social número 3 a quienes informó lo anterior, “Que soy residente americano y tengo mi
domicilio en Denver, Colorado, y es el caso que el día 15 de diciembre del 2013, llegué a Ciudad Juárez junto con mi esposa y mis tres hijos a visitar a unos parientes de mi esposa y a pasar aquí la navidad. Y todo iba muy tranquilo hasta el día 19 de diciembre del 2013 que me fui temprano al Paso (sic) para hacer unas compras, me fui en autobús, ya que mi camioneta de la marca Taho (sic) modelo 2003, color arena la había dejado con un amigo de mi esposa a quien conocía como el primo, porque él iba a hacer un presupuesto para unos arreglos de carrocería de mi camioneta. Total que cuando regresé de El Paso, Tx. como a eso de las cinco de la tarde pasé al negocio del “Primo” para recoger mi camioneta. Cuando llegué, el primo me pidió un “rait” para ir a ver una muchacha y yo lo llevé, pero no sé a qué calle exactamente. Ya cuando íbamos de regreso “el primo” y yo, entre seis y siete de la tarde, iba por la calle manejando, vi una camioneta que venía de frente “zigzagueando” y se me echó encima, y yo pensé que se trataría de algún borracho, pero cuando me fije bien vi que era una patrulla de la Policía Municipal, no traía ni las torretas prendidas, ni nada, y pensé que había pasado algo, sólo esquivé y seguí mi camino, pues a mí no me hizo ninguna señal para que me detuviera, y supe que sólo quería pasar y yo les estorbaba. Yo seguí mi camino hacia enfrente y como a las cinco cuadras, frente a una maquiladora, no sé el nombre, vi por el espejo retrovisor que venía una patrulla con las torretas prendidas y escuché balazos, yo lo que hice fue orillarme, pero como me asusté le pegué a una banqueta y se paró mi troca. En eso veo que la patrulla se sigue derecho, y avanza poquito y da vuelta en “U” sobre la calle, dirigiéndose de frente a nosotros, y vi que empezaron a dispararnos, entrando los balazos por el vidrio de
enfrente y por la puerta de mi lado. Entonces “El primo” me dice, “ya me dieron en el pecho” y se cae sobre el asiento. Yo sentí muy caliente mi brazo derecho y mi cara del lado derecho y me vi mucha sangre, entonces supe que a mí también me habían disparado, lo que yo hice es abrir la puerta y tirarme al suelo, para que ya no me dispararan. En eso se acercaron como cuatro policías municipales, con uniforme de policía, uno con la cara tapada y con rifles. En cuanto se acercaron, me preguntaron “donde están las armas wey” yo les dije que no traíamos nada de eso. Y yo escuché
que uno de los policías dijo “Esta es una Tahoe, éstos no son” y el otro dijo “Pues ya que, este sí está vivo” y fue cuando yo les dije que era residente de Estados Unidos, que por qué me disparaban y no me contestaron, sólo le hablaron a una ambulancia y de ahí ya no me acuerdo qué pasó. “El Primo” ahí mismo se murió por los balazos, y yo estuve grave, me dieron tres balazos en el brazo derecho y uno en el ojo derecho, el ojo lo perdí totalmente y el brazo aún me tienen que poner unas placas para no perderlo, también perdí totalmente el oído derecho, no escucho nada. Por lo que en este acto autorizo a que me tomen fotografías de mis lesiones… me lesionaron tan gravemente que perdí mi ojo y mi oído y está en riesgo mi brazo, que mataran “al primo” y que me acusen de que yo les disparé a ellos e intenté matarlos y traía armas. Además quiero que me ayuden a ver mi situación de salud, ya que aún necesito cirugía en mi brazo y sigo mal de salud.
Así mismo deseo que mi familia pueda tramitar el código de acceso a visitarme”.