Durante un acto priista donde nada puede malir sal… ejem, salir mal, uno de los encargados de la seguridad del mismísimo presidente de la República fue víctima de un “dedos finos” que le dio baje con el arma con el que decentemente desempeña su chamba.
Según información de Radio Fórmula, David Navaez Velasco, teniente del Estado Mayor Presidencial, el pasado 25 de julio estaba cuidando a EPN quien, como ya es costumbre, desbordó las pasiones de los presentes… justo ahí, entre la lluvia de selfies y de ropa interior (de mujer y hombre) con dedicatoria al presidente, fue cuando ocurrió el hurto:
“Al término del evento, un grupo de personas quiso acercarse al Presidente de la República; desbordó la barrera de contención y brincó la protección, por lo que al contener a dicho grupo de personas es desapoderado de una pistola Smith and Wesson, calibre 9 mm, modelo SW9F, matrícula PAM0715”.
Lo anterior, consta en la averiguación previa FCH/CUH-2/T2/1200/15-07 levantada por el despojado guarura presidencial el mismo día del incidente. De acuerdo con Zócalo, hasta el momento no se han realizado diligencias en las instalaciones del Revolucionario Institucional y sólo se tiene conocimiento que el robo fue cometido el sábado pasado. Además de la denuncia ante la Procuraduría General de la República, el incidente ya fue reportado ante la Secretaría de la Defensa Nacional.
Si ni un agente entrenado para situaciones de seguridad pudo percatarse del bolseo que le aplicaron, qué puede esperarse un civil entre los apretones del Metro… aunque hay quien dice que sí se percató que alguien le metió mano, sólo que pensó que iba con buenas intenciones.
Fuente: Sopitas