Los besos son una de las tantas formas en las que uno expresa amor eterno, cariño, respeto, admiración y más. Pero, aunque seguramente hayas empezado a hacerlo desde pequeña, ¡hay cosas que no sabías de esta apasionante práctica!
Es bueno para tu salud: Los besos hacen que tu piel se vea más saludable, ayuda a la circulación de la sangre, previene la caída de los dientes e incluso son la mejor medicina para los dolores de cabeza.
Es un ejercicio: Utilizas solamente 2 músculos con un beso en la mejilla pero con uno francés bien dado, ¡usas 34! Son casi todos los músculos faciales. Y no sólo eso, por cada beso francés, quemas 5 calorías, ¿te imaginas cuántas quemarás si lo haces por una hora?
Es adictivo: Las endorfinas que se le liberan con los veces son 200 veces más poderosas que los efectos de la morfina. Ahora podemos entender la sensación de ensueño que te brinda darle unos besos a tu novio.
Es poco higiénico: ¿Sabías que con un beso puedes transmitir 278 tipos de bacterias? De hecho, un largo beso podría dejarte con 10 millones de bacterias nuevas. Ahora yo no te pueden decir que besar al perro es más asqueroso.
Es una ciencia: Al estudio de los besos se le llama ‘filematología’ y se concentra en los besos y sus significados en distintas culturas.
Es bueno para los dientes: Besar y anticipar el beso producen un incremento de saliva lo cual es bueno para tus dientes. Esto es porque la saliva elimina bacteries y previene caries.
Reafirma la piel: ¿Viste que puedes utilizar hasta 34 músculos con un beso francés? Pues esto no solamente te ayuda a quemar calorías, sino que también reafirma la piel de las mejillas.
Inició con las… ¡ratas! Un equipo de investigadores de la Univresidad de Tokio cree que el deseo de los humanos por dar besos proviene de una rata antigua. Estas ratas se tocaban y acariciaban sus narices para expresar su deseo sexual… ¿beso de roedores?
Eme de Mujer