Una Alternativa Verde es el nombre de un expendio de mariguana con fines terapéuticos que abrirá la próxima semana a sólo una cuadra de la frontera.
Es el primer negocio de ese tipo que autoriza la ciudad de San Diego después de 20 años de negar permisos para abrir dispensarios, como se les nombra en California a los negocios de mariguana medicinal.
David Blair, un profesor de ética de negocios de la Universidad Estatal de San Diego, a quien el cabildo de la ciudad autorizó el dispensario, dijo que está listo para abrir la alternativa y atender al público dentro de unos días.
El expendio, con ventanales y entrada a prueba de balas y paredes con sistemas de alarmas y seguridad, se encuentra apenas una cuadra después de salir del perímetro de la garita de Otay, en California.
Quienes cruzan a pie desde Tijuana sólo tienen que avanzar hasta encontrar la primera calle y antes de llegar a la segunda podrán encontrar la “alternativa verde” cerca de negocios de comida rápida, remates de ropa y teléfonos celulares.
Pero no cualquier persona que cruce la frontera podrá comprar de entre una gran variedad de distintas mariguanas que estarán a la venta en el negocio.
La ley de la mariguana compasiva, de California, fue aprobada en 1995, en elecciones, con la idea de que ese narcótico mitiga dolores y síntomas insoportables de enfermedades terminales, como el cáncer y la esclerosis múltiple.
Con el tiempo, la lista de padecimientos se ha ampliado e incluye ahora, por ejemplo, la tensión nerviosa o estrés. Pero para llevar una terapia con mariguana un paciente necesita receta médica y pruebas que de alguna manera requiere de ese tipo de tratamiento.
Blair dijo que tiene que ser muy cuidadoso con requisitos como ese, pues renovar anualmente el permiso dependerá de que se apegue a normas que revisará la policía de San Diego.
El profesor ha sido hasta ahora el único en conseguir que el cabildo de San Diego accediera a abrir una tienda de mariguana, aun cuando ya hay estados que permiten el consumo recreativo.
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