Una ciudadana china de 30 años, acusada de haber robado un diamante que cuesta 10 millones de baht (278.000 de dólares) en una feria de joyas en Nonthaburi, Tailandia, confesó que se lo había tragado, informaron las fuentes policiales citadas por Bangkok Post.
Jiang Xulian lo declaró después de ser sometida a un examen con los rayos X que revelaron un objeto parecido al diamante en su intestino.
La mujer junto con su pareja fue detenida el viernes en el aeropuerto de Suvarnabhumi, después de que un participante de la feria denunciara a la Policía que los dos chinos cambiaron el diamante de seis quilates por uno falso durante el evento.
Inicialmente los detenidos rechazaron todas las acusaciones, al afirmar que son simplemente turistas de visita en Tailandia.