Fue hasta que el agente del Ministerio Público leyó la acusación en su contra que Andrómeda Elizabeth Cordero Flores se enteró que había asesinado a su pequeña hija de 4 meses de edad. Al saberlo la mujer entró en una crisis histérica, informa El Debate.
De acuerdo al diario Reforma, durante las diligencias periciales se conoció que la mujer dio positivo en benzodiacepina, un medicamento utilizado contra la ansiedad y otros desordenes neuróticos.
De acuerdo a una fuente, la mujer – que ya se encuentra internada en el penal de Topo Chico- lloró desconsoladamente al ser enterada de la muerte de su bebé Elizabeth, que ocurrió el lunes.
Por su estado, la familia no le había informado a la mujer la muerte de la bebé, ni que la Procuraduría la considera como la única sospechosa de las agresiones contra sus hijos.
Además, el día 13 de septiembre el diario Info7, dio a conocer que Sofía, la otra hija de Andrómeda, de dos años de edad, perdió la vida.
La menor, que también fue atacada por su madre, presentaba una herida debajo del corazón que le había dañado una arteria.
Se espera que el día 15 de septiembre se lleve a cabo la audiencia de control de la mujer.
A Andrómeda Elisa se la acusa de homicidio, tentativa de homicidio y violencia familiar, pero con el fallecimiento de su segunda hija la mujer enfrentará un cargo de doble homicidio.
El único sobreviviente de la terrible tragedia es Jesús Said, de 7 años de edad, quien es reportado como estable.
Ahora, Yolanda Flores Garza, la madre de la mujer y abuela de los niños, pide que las autoridades traten a su hija como una víctima más de la violencia intrafamiliar.
“No se ensañen con ella, es una víctima. Este mundo en el que estamos, es tanta la violencia que tiene que sufrir. Nosotros nisiquiera alcanzamos a comprender qué fue lo que pasó, mi hija debió haber pasado algo muy difícil para haber hecho esto”, mencionó la mujer.
Fuente: El Debate