La Estrella es un pueblito español de tan solo dos habitantes, un matrimonio octogenario que vive solo desde hace más de 30 años.
Ubicada en la provincia aragonesa de Teruel, la población es accesible solo mediante un estrecho camino forestal entre barrancos de gran pendiente.
Sinforosa Sancho y Juan Martín Colomer viven sin agua corriente, televisión ni teléfono fijo, y para usar el móvil tienen que subir al monte. La energía eléctrica les llegó hace un par de años mediante paneles solares.
Lavan la ropa a mano y para saber la hora miran el reloj solar en la plaza del pueblo.
“No necesitamos nada más, para qué”, aseguran.
“Comemos cuando tenemos hambre y nos vamos a dormir cuando nos entra el sueño, sin mirar la hora”, dijo Sinforosa al portal Heraldo.es.
La pareja, que pronto celebrará sus bodas de oro, dice que no toma ningún medicamento.
Hace años la población de más de cuarenta casas estaba llena de vida: tenía su alguacil, dos maestros, un cura, un secretario, un par de tabernas e incluso vio nacer al famoso torero el Niño de La Estrella. Poco a poco la población se fue mudando a las ciudades. Pero Sinforosa y Martín se quedaron.
“Nosotros nos hemos criado aquí y no nos llama nada marcharnos a otro sitio. Aquí estamos estupendamente cuidándonos el uno al otro y con nuestros animales”, afirmó Sinforosa.
El matrimonio tiene gallinas, abejas y un gallo, así como gatos y perros.
Dos veces al año la población se llena de gente durante las romerías al Santuario de La Estrella. Horas después los feligreses dejan a Sinforosa y Martín cara a cara con la soledad, la calma y la naturaleza.
RT Noticias