Aunque el último caso de contagio natural de viruela se registró en 1975, aún se mantienen muestras en dos laboratorios autorizados. Sin embargo, no serían los únicos. Por eso, recrudeció el temor a que sean utilizadas como un arma bioquímica, publicó RT Noticias.
¿Qué ocurriría si el virus de la viruela cayera en manos de terroristas?
Un brote en Estados Unidos podría ser contenido gracias a que posee las reservas de vacunas. Sin embargo, el resto del mundo sufriría las consecuencias.
La segunda pregunta a responder debería ser por qué podría haber riesgo de que eso ocurra, si el último caso se registró hace 40 años. La enfermedad se controló, sin embargo, aún hay reservas del virus.
El último contagio natural del virus de la viruela común, según publicó el diario ‘Clarín’, se dio en la isla Bhola, en Bangladesh. La protagonista de esa historia fue una niña, Rahina Banu. Fue en 1975 y una delegación de la Organización Mundial de la Salud (OMS) viajó hasta esas tierras para asistir a la joven y logró salvarle la vida.
Después, hubo una sola muerte por ese tipo de viruela ―enfermedad que mató a 300 millones de personas en la historia― y fue en un accidente de laboratorio. Ocurrió en 1978, cuando la fotógrafa médica Janet Parker se contagió en la Universidad de Birmingham.
Tras este accidente, la OMS instó a todos los países a destruir las reservas congeladas del virus o enviarlas a los dos laboratorios autorizados, uno ubicado en Estados Unidos y el otro en Rusia. Además, fijó como fecha para su destrucción total el año 1993. Esto no se cumplió. El plazo se extendió, primero a 1999 y luego a 2002.
Sin embargo, los ataques a EE.UU. de 2001 hicieron cambiar los planes, por lo que la OMS permitió que se mantuvieran las muestras para su estudio en laboratorios de Atlanta y de Moscú, en especial, ante el temor a que terroristas se apropiaran del virus y lo utilizaran como un arma bioquímica. Frente a esta posibilidad la Casa Blanca aseguró que tiene reservas de vacunas para contener un eventual brote en su país. Lo que ocurriría en el resto del mundo no se sabe.
Un último dato preocupa a la comunidad internacional: los laboratorios autorizados no serían los únicos que tendrían el virus, ya que en 2014 se encontraron muestras en un depósito de la Administración de Alimentos y Medicamentos en Maryland.