El Parque Nacional Kaziranga, ubicado en la zona noreste de India, es el albergue de rinocerontes de un cuerno más importante de todo el mundo, pues en él viven 2,400 de ellos, es decir la tercera parte de la población de la especie en todo el mundo.
Hace un siglo, la reserva natural sólo contaba con un minúsculo puñado de rinocerontes, por lo cual se pusieron práctica algunos métodos que han causado gran polémica a nivel mundial.
Uno de ellos, el más controversial, es el referente a una especie de permiso que en la nación asiática únicamente es conferido a las fuerzas armadas o a la policía en casos de insubordinación civil, pues se puede matar a quien se sorprenda cazando a la especie.
El gobierno les ha dado a los guardaparques de Kaziranga, facultades extraordinarias por medio de las cuales se les brinda una protección considerable si son acusados de matar gente dentro de los perímetros del parque.
De acuerdo a lo señalado por medios locales, se han registrado más muertes de personas en el parque, que de rinocerontes, como en 2015, cuando 23 personas fueron asesinadas, en comparación con 17 rinocerontes que fueron ultimados.
Al respecto, uno de los guardias señala: “la instrucción es que cuando veamos a un cazador, saquemos las armas y lo persigamos”
Sin embargo, la director de la reserva Satyendra Singh, considera que la medida descrita como a orden de disparar en el acto, no describe de forma correcta la forma de operar por los guardabosques, pues antes de que se desarrolle la persecución, explica, se da una advertencia y en caso de que los implicados acciones armas de fuego, revela, nosotros tenemos que matarlos”.
“Primero tratamos de arrestarlos, para obtener información de con quién están vinculados, quiénes son los otros miembros de la banda”, señala.
Pese a ello, defensores de los derechos humanos, sostienen que el alto número de muertes humanas, se debe en gran medida a la protección legal que gozan el parque y sus empleados.
Pranab Doley, promotor de las garantías individuales, expone que “esa suerte de impunidad es peligrosa”, pues apunta que “crea una animosidad entre el parque y la gente que vive la periferia”.
Incluso la organización civil, Survival International, sostiene que los derechos de las comunidades tribales han sido sacrificados en beneficio de la protección de la vida silvestre.
“El parque está manejado con una enorme brutalidad”, dice Sophie Grig, líder de la campaña. “No hay jurado, no hay juez, no se hacen preguntas. Y lo más aterrador es que hay planes para implementar esta política de disparar en el momento en toda India”.
Otra de las críticas en contra de la administración de la reserva, es la referente a que en los últimos años, las autoridades de la misma han usado desalojar a las comunidades aledañas para extender su superficie, por lo cual se estima que más de 200.000 personas deberán abandonar sus hogares.
En fechas recientes, la policía desalojó a dos comunidades en medio de protestas que acabaron en una riña, en la cual los pobladores fueron golpeados con palos y dispersados por la policía, lo cual provocó que dos personas -un padre de familia y una joven estudiante- murieran.
No obstante, llegaron excavadoras y el parque prestó sus elefantes para derribar a todas las casas del poblado.
Fuente: SDP Noticias
Source: Crealo