La llegada de Trump a la Casablanca ha supuesto un revuelo en muchos ámbitos. Siendo más específica, las promesas electorales sobre los aranceles a los productos importados ha generado mucha incertidumbre y más en el sector de las renovables. Además con la elección del ejecutivo petrolero, Chris Wright, la preocupación aumenta alrededor del sector de las energías limpias. Y el país más perjudicado en toda esta situación por la producción de paneles solares es China, pero ha encontrado la forma de eludir los aranceles.
China y los paneles solares. Si hay un líder indiscutible en el sector de la energía solar es China. Su participación en cada etapa de la cadena de fabricación de paneles solares supera el 80%. Sin embargo, a pesar de su posición de liderazgo, el 1% de los paneles solares exportados por el país asiático tiene como destino Estados Unidos, debido a las medidas de antidumping y aranceles existentes hace más de una década.
No obstante, China no se iba a quedar de brazos cruzados y ante el boom de energías limpias, hizo una reestructuración en sus cadenas de suministro.
Esquivando aranceles. China ha encontrado la forma de eludir los aranceles, solo tenía que trasladar parte de su producción a otros países como Camboya, Malasia, Tailandia y Vietnam. De hecho, uno de los mayores fabricantes, Longi ha expandido sus operaciones en los países mencionados y este crecimiento se debe a una diversificación de sus cadenas de suministro y minimizar el impacto de las barreras comerciales.
A pesar de los esfuerzos por evitar los aranceles, el Departamento de Comercio de EE.UU. iba detrás de la pista y ya el año pasado señaló que algunas empresas chinas utilizaban estas instalaciones en el sudeste asiático para evadir las tarifas mediante el uso de prácticas como la reexportación de paneles solares. Así que las medidas ahora se centran en imponer medidas antidumping y más aranceles, pero China ha encontrado aún más atajos.
La apertura a Medio Oriente. La industria china ha redirigido sus operaciones hacia el Consejo de Cooperación del Golfo, en el que se encuentran países como Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos. Esta estrategia de China para proteger sus aranceles de los impuestos estadounidenses lo lleva a explorar otras zonas como Medio Oriente.
China está haciendo todos los esfuerzos para no enfrentar los aranceles de Estados Unidos y el nuevo mandato de Donald Trump ha provocado incertidumbre hacia el futuro de las renovables en Estados Unidos. No obstante, China sigue intensificando sus esfuerzos globales mediante la Iniciativa del Cinturón y la Ruta, que busca conectar economías a través de proyectos de infraestructuras, ahora más enfocado en energía renovable en zonas de Asia Central y África.
Una forma más de seguir diversificando el mercado y reflejando un ajuste continúo de las políticas chinas frente a las barreras comerciales y no depender exclusivamente de Estados Unidos.
Source: Crealo