Recurrir a cirugías estéticas no es juego, y es que se debe tener en cuenta el profesionalismo del cirujano encargado de la operación para no terminar como una mujer italiana que murió por recurrir a una clínica más barata, pero clandestina, en República Dominicana.
Resulta que la mujer tuvo diversos problemas de salud tras la liposucción a la que se sometió, por lo cual, permaneció varios días en terapia intensiva hasta que su cuerpo sucumbió ante las complicaciones.
Por ahorrar un poco de dinero, la mujer murió y dejó a sus cuatro hijos desamparados, según reportó Telemundo.
Autoridades locales investigan a los cirujanos de dicha clínica para determinar la causa de la muerte de la paciente, la cual apunta a negligencia médica.
Fuente: TV Notas