Hace ocho meses, Vincent, un perro salchicha de 7 años de edad, pesaba 17 kilos, el doble del peso saludable para un perro de su raza. Tenía problemas de salud y estaba deprimido, después de que fue entregado a un refugio de animales en Houston tras la muerte de su propietario.
El perrito salchicha penas podía caminar, tenía el colesterol alto y la espalda caída por el peso, un caso que muestra que los humanos no somos los únicos que sufrimos de dicho mal.
Ante la situación, un grupo K-9 Angels Rescue, un grupo de rescate de animales en Houston, ayudó a Vincent en su camino hacia la recuperación. El caso de Vincent es extremo, aunque la obesidad afecta a una gran cantidad de animales domésticos. Según una estimación de 2014, el 52,7% de los perros estadounidenses tenían sobrepeso u obesidad.
El peso ideal para Vincent fue calculado en 7,2 kilos, por lo que tuvo un largo camino por recorrer para llegar a ese objetivo. Pero con la ayuda de su cuidadora, Melissa Anderson, y su veterinaria, fue capaz de alimentarse bien y perder peso.
Incluso consiguió un patrocinador en su camino en el fitness. Sharon Anderson vende Royal Canin, una marca de comida para perros, en su clínica. Tratando de encontrar maneras de ayudarlo a hacer ejercicio, Melissa Anderson utilizó la piscina para llevar a cabo un régimen de ejercicios aeróbicos acuáticos.
Cuando el peso comenzó a bajar, su capacidad de dar paseos más largos aumentó. Hoy en día, camina alrededor de una hora entre cinco y seis veces a la semana.
Con información de CNN