Quienes siempre dan caen en un sacrificio desmedido por algo que creen que es amor, pero te invito a hacer las siguientes reflexiones que publicó César Lozano para no ser parte de ese grupo :
1.- ¿Lo vale o no lo vale?
Esto que estás haciendo es un sacrificio que debe terminar en un beneficio para ambos, no solo para una de las partes. Si a pesar de hacerlo una y otra vez todo es igual y tú te vas sintiendo peor, debes de salir de ahí cuanto antes pues te estás convirtiendo en una olla de presión que explotará emocionalmente en el peor momento.
2.- ¿Te sientes cansado de siempre ser así?
Esta es señal clara de que tanto dar te ha lastimado, ese sentimiento puede afectar no solo tu relación con esta persona sino también con otros que te rodean y puedes terminar creando un escudo que nadie podrá romper, dejándote solo y quizá hasta amargado.
3.- ¿Cuándo fue la última vez que esa persona te escuchó o te concedió algo?
Así como das, también debes recibir o te quedarás vacío. Si esa persona no te da este lugar especial, no te toma en cuenta, estás con alguien egoísta a quien no le importas. Mereces estar con alguien que te valore y que busque el bienestar de ambos.
Source: Crealo